Activista egipcio se disculpa por antiguas publicaciones que desatan polémica en R.Unido
"Al releer ahora esos tuits (publicaciones en Twitter antes de que pasara a llamarse X), entiendo cómo pueden resultar impactantes y dolorosos, y por ello me disculpo de manera inequívoca. Eran en su mayoría expresiones de ira y frustración de un joven...

El Cairo, 29 dic (EFE).- El activista Alaa Abdelfatah, con nacionalidad egipcia y británica, se disculpó este lunes por sus antiguas publicaciones que han desatado la polémica en el Reino Unido, poco después de haber llegado a Londres tras el levantamiento de su prohibición de viajar que pesaba desde que fuera liberado de prisión en septiembre tras más de una década encarcelado.
"Al releer ahora esos tuits (publicaciones en Twitter antes de que pasara a llamarse X), entiendo cómo pueden resultar impactantes y dolorosos, y por ello me disculpo de manera inequívoca. Eran en su mayoría expresiones de ira y frustración de un joven en una época de crisis regionales (guerras en Irak, en el Líbano y Gaza) y del aumento de la brutalidad policial contra la juventud egipcia", afirmó en un comunicado emitido por la campaña para pedir su libertad.
Lamentó "especialmente algunos" que fueron escritos como parte de "batallas de insultos en línea, con un total desprecio por cómo podían ser leídos por otras personas".
Dijo que ahora, al mirar atrás en el tiempo, ve "los escritos de una persona mucho más joven, profundamente inmersa en culturas digitales antagonistas, utilizando tonos frívolos, provocadores y sarcásticos en el mundo incipiente y febril de las redes sociales".
Pero ese joven -aclaró- "nunca tuvo la intención de ofender a un público más amplio y, en el mundo real, estaba comprometido con el movimiento prodemocracia no violento", por el que fue encarcelado en Egipto "en repetidas ocasiones por pedir igualdad plena, derechos humanos y democracia para todos".
Se mostró "conmocionado" de que tras reunirse por primera vez en doce años con su familia -también con nacionalidad británica- "varios tuits históricos míos hayan sido republicados y utilizados para cuestionar y atacar mi integridad y mis valores, llegando incluso a llamamientos para la revocación de mi ciudadanía".
La líder conservadora Kemi Badenoch y el líder del partido Reform UK, Nigel Farage, dijeron que la ministra del Interior, Shabana Mahmood, debería considerar si se puede revocar la ciudadanía de Abdelfatah para permitir su rápida expulsión del Reino Unido.
En el comunicado, el activista, de 44 años, subrayó que "algunos tuits han sido completamente malinterpretados, aparentemente de mala fe", como algunos que señalan su "antisemitismo".
Ante esto, dijo que se toma "muy en serio las acusaciones de antisemitismo. Siempre he creído que el sectarismo y el racismo son las fuerzas más siniestras y peligrosas, y cumplí con mi parte, pagando el precio, al defender los derechos de las minorías religiosas en Egipto. Me enfrenté a un tribunal militar y a la prisión por defender a cristianos en Egipto falsamente acusados de violencia".
Alaa Abdelfatah es un periodista y activista prodemocracia que se dio a conocer durante las revueltas populares de 2011, la llamada Primavera Árabe. Dos años después, fue detenido por protestar frente al Parlamento egipcio y se convirtió en uno de los presos más célebres del país africano.
Luego, en 2019 salió de prisión por unos meses con la obligación de dormir todas las noches en una comisaría, pero ese mismo año volvió a ser detenido y, dos años después, se emitió una condena en su contra por "difundir noticias falsas".
A pesar de cumplir su pena de cinco años en septiembre de 2024, las autoridades egipcias se negaron a liberarlo, al no reconocer como parte de su condena los dos años que permaneció en prisión provisional.
Tras intensas campañas por su liberación, entre ellas una huelga de hambre que llevó a su madre a ser hospitalizada, quedó en libertad hace dos meses tras un indulto emitido por el presidente de Egipto, Abdelfatah al Sisi.
La decisión fue ampliamente celebrada por organizaciones humanitarias como Reporteros Sin Fronteras o Amnistía Internacional, que recordaron que en Egipto continúa habiendo presos políticos y de conciencia.EFE
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