Berlusconi preocupado: hay fotos de sus fiestas sexuales sin preservativo
La novela de las fiestas sexuales prohibidas de Silvio Berlusconi no termina y más detalles agravan el escándalo político. El diario italiano La Stampa de Turín asegura que hay fotografías tomadas por Patrizia D'Addario sobre sus noches de sexo con el premier, mientras que L'Espresso publicó otras cuatro grabaciones de la prostituta de lujo, en la residencia romana donde se habrían realizado dichas fiestas.
En el diario propiedad de la Fiat, el periodista Amedeo La Mattina habla de imágenes comprometedoras que nockearían a Berlusconi. Al parecer, el primer ministro está preocupado porque habló con su abogado y diputado Niccolo Ghedini y hasta intenta detener la publicación de La Stampa.
Por su parte, L'Espresso publicó otras cuatro grabaciones de las noches que pasó Patrizia en la residencia romana de Silvio. Los audios demuestran que es falso que Berlusconi no conocía a la mujer, aunque el líder conservador afirma que son "inventados".
D'Addario presentó diez cintas grabadas y un video realizado con su teléfono celular a la fiscalía de Bari. En este último se ve un dormitorio del Palazzo Grazioli, donde está la cama grande (lettone) regalada por el líder ruso Vladimir Putin a Il Cavaliere. La misma habría sido ocupada durante la noche y la madrugada de fuego del 4 de noviembre del año pasado por Berlusconi y Patrizia. Hasta se ve el baño de la residencia del premier.
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Pero eso no es lo que mantiene intranquilo a Silvio, sino las fotos de las que habla La Stampa, que las tilda de "picantes y comprometedoras".
En medio del escándalo, la prostituta de lujo hizo una sesión de fotos para la revista Interviú y cobró 32.000 euros. En la nota cuenta detalles de sus dos encuentros privados en en el Palazzo Grazioli con Berlusconi.
Las cintas de Patrizia muestran un diálogo a mediados de octubre 2008 entre ella y el empresario de Puglia, Gianpaolo Tarantini, que presentaba los "gatos" al premier y donde anuncia que la pasará a buscar para ir "allí". “Mil por la noche”, dice ella. "Ya te di mil, después si te quedas con él te hará él mismo el regalo, pero mira que no usa el preservativo, eh?, responde el empresario.
Ante sus palabras, Patrizia insiste: "¿Cómo? Pero no existe una cosa sin preservativo, ¿cómo puedo confiarme?... cuánta gente ha quedado" (hace referencia a los contagiados de SIDA). "Bueno, es Berlusconi!... ¿Pero sabes cuántos exámenes se hace hacer él?", responde Tarantini.
En otro de los audios, fechado en el 5 de noviembre, mientras la pareja desayuna en el Palazzo Grazioli de Roma, ella se queja ante Silvio diciéndole “me has causado mucho dolor... te lo juro”. “No es cierto...”, responde el primer ministro.
Las otras dos grabaciones no tienen tono sexual sino político. En ellas, Berlusconi habla de la reunión cumbre del G-18 y el G-14 en L'Aquila y de la escasez de turistas en su país. Un escándalo que sigue creciendo en Italia y mantiene en vilo a Il Cavaliere, cuyas andanzas quedaron al descubierto por "sus propias chicas".
