El juicio de una millonaria que mató a sus padres se convierte en una sórdida telenovela brasileña

Un juicio por el asesinato de un matrimonio brasileño se convirtió en una verdadera teleserie de terror, en la que los acusados, entre ellos una hija de la pareja, destapó todas sus miserias para salvarse. Los dos hermanos Cravinhos y Suzane, hija de los Von Richthofen, se han acusado mutuamente de ser los inductores del crimen y para convencer al jurado, ventilaron historias sórdidas sobre virginidad, drogas, violencia familiar, alcoholismo y abuso sexual que ocupan a diario los titulares de la televisión y de la prensa escrita.

'Los padres de Suzane, borrachos, eran extremadamente agresivos, entre ellos y con los hijos. No sé si era constante en la vida de ellos', dijo Nadja, madre de los Cravinhos, a quien citaron como testigo los abogados de sus hijos.

Las acusaciones de violencia familiar, rebatidas en el juicio por Andreas, hermano menor de Suzane, son pálidas ante otras imputaciones que se han hecho contra la víctimas.

Según Daniel Cravinhos, el padre de Suzana abusaba sexualmente de ella y la madre la golpeaba con frecuencia por motivos banales, por lo que ella decidió asesinarlos para, además, quedarse con la herencia.

Pero esas descripciones no coinciden con las de otras personas, que aseguran que el matrimonio Von Richthofen era dedicado por entero a sus dos hijos.

Para achacar toda la responsabilidad del crimen a los hermanos Cravinhos, que fueron los ejecutores, los abogados de Suzane han argumentado que la chica perdió la virginidad con Daniel, que, a partir de ese momento, ejerció total control sobre ella hasta tal punto de inducirla a asesinar a sus padres.

Esa tesis fue rebatida por Daniel y su madre, quien hoy afirmó que, según su hijo le contó alguna vez, Suzane tenía problemas cuando hacía el amor con él, lo que atribuyó a supuestos traumas sexuales.

'Llegamos a la conclusión de que Suzane habría tenido un problema con un antiguo novio o una posible violación de su padre', afirmó hoy la señora sin el menor asomo de respeto hacia las víctimas.

La mujer agregó que Suzane manipulaba a su hijo e 'hizo de él un instrumento durante todo el tiempo en que convivieron', lo que llevó a un llanto copioso a Daniel y Christian Cravinhos.

Los abogados de Suzane, que también acusan a Daniel de iniciarla en el uso de marihuana, han dicho además que como prueba de que la chica participó en el asesinato de sus padres 'por amor', ella está dispuesta a renunciar a la herencia, calculada en más de dos millones de reales (unos 905.000 dólares).

'Eso es otro teatro más', dijo hoy Nadir Campos Junior, uno de los fiscales del caso, quien el lunes pidió 38 años de cárcel para cada uno de los tres acusados.

Los fiscales también calificaron como teatro la declaración de Daniel Cravinhos, según la cual después de asesinar a la pareja Von Richthofen se arrodilló y rezó.

El cruce de acusaciones entre los reos y sus abogados ha dejado a los fiscales como meros espectadores de la trama, hasta el punto de que hoy descartaron la necesidad de un careo entre Suzane y los hermanos Cravinhos, porque ya han entrado en suficientes contradicciones.

El juicio seguirá el jueves con la presentación de otros testigos y un jurado de siete miembros dará su veredicto ese mismo día o a más tardar el viernes.