Adriana Brodsky volvió a ser "La Bebota" y evocó con devoción a Alberto Olmedo

Por Canal26

Sábado 24 de Marzo de 2012 - 00:00

“Recibí una apretadita, chicos” 'denunció' entre risas, besos, loas y aplausos, la siempre bella Adriana Brodsky como muestra del 'acoso' al que la sometieron Vinchu y Simonetti, los co- conductores de “Kavlin de Ultimo Momento” al hacer su ingreso triunfal como en sus mejores tiempos, al estudio donde se emite el programa humorístico que conduce David Kavlin a la medianoche recién empezado el sábado por Canal 26.

Adriana revelo que en el interín a su entrada a la escenografía había mantenido “una charla intensa” con los compinches de Kavlin, a lo que David, atinadamente le advirtió “que estap uede se una charla intensa”.

Y vaya si lo fue porque la rubia actriz no dejó tema sin tocar ni anécdota sin recordar de su paso por “No Toca Botón” donde brillara hasta mediados de la década del 80' junto al recordado Alberto Olmedo y el del también desaparecido Javier Portales.

Enseguida Brodksy confirmó que se casó dos veces y que no se casaría “ni una vez más”.

“Para mi es ya es too much” eligió el inglés para “demasiado”, porque dijo “ya es que como que vas a sabiendo a lo largo de los años, de qué se trata, vas aprendiendo un montón de cosas y ya aprendí cómo es el hombre” develó y opinó que “son imposibles con mi filosofía de vida ” al tiempo que descartó que le gusten las mujeres.

“Touch and go” tampoco adelantó cuando Kavlin “se la presentó” al panelista Simonetti, invitación que la blonda declinó.

Enseguida reveló que no Twitter “porque no me gusta nada con lo que tenga que comunicarme con demasiada” y cayó en la trampa que le tendió Kavlin, rápido de reflejos, cuando le sugirió que no le gustaba entrar en contacto “con tu ex pareja”, apelación que la actriz devolvió con una sonrisa cómplice.

“Soy super solitaria – se definió - y solamente tengo un grupo cerrado de amigos” que paradójicamente “todos” tienen twitter “menos yo, soy bastante prehistórica ”, se definió entre risas Adriana.

Acerca de “La Bebota”, el personaje de “El Manosanta”, Brodsky reveló que ese personaje yo no lo busqué, me lo dieron, cosa que agradezco hasta hoy y lo valoro mucho porque me dio la fama, dinero, con esos pude sobrevivir, ayudar a mi familia, incluso amigos y me sentí muy dichosa por eso e incluso por la aceptación de la gente, porque si bien sabía que no tenía mucho talento – se autodefinió en una frase cargada de humildad – de alguna manera u otra podía llegar a la gente”.

Kavlin hio hincapié en la confesión de Adriana de que reconocía “que no tenía mucho talento” y le preguntó si ella lo corroboró con el paso de tiempo a lo que Brodsky le contestó que desde siempre lo supo y “que no entendía como ella podía estar en un programa que tenía 60 puntos de rating con grosos como Santiago Bal, María Rosa Fugazot, Jorge Porcel, Luisa Albinoni y yo era una desconocida total y yo estaba en ese programa porque me descubrió un productor llamado Carlos Bianchi que no es el DT – aclaró – y me llevó a ver a Gerardo, y Gerardo (por Sofovich) en un segundo me dio ese personaje de nena que encarnó personajes muy angelicales, era muy lindo, muy sensual, y bastante inocente ” definió sin dejar de gestualizar las comillas para en realidad darle entidad a su infartante actitud comehombres.

“Estoy muy agradecida de ese personaje y lo voy a estar hasta el resto de mi vida” manifestó Adriana.

Luego acerca de quién fue más grande si Alberto Olmedo o Jorge Porcel, Adriana no dudó en el elegir a Olmedo “porque además de que en la parte profesional era 'grosísimo' en la parte humana dejaba huella “El Negrito” y hoy le preguntás a toda la gente del medio sobre Olmedo y no hay una sola persona que te insinúe algo malo de Olmedo, fue unánime”, reforzó.

Brodsky luego opinó que para ella “Olmedo tenía su costado triste” y se mostró arrepentida de “no haber ido a cenar con el equipo de trabajo, o compartido los cumpleaños con el “Negrito” (por Olmedo), me perdí todo eso”, se lamentó y consultada acerca de si en esas situaciones Olmedo “era mejor que en cámara”, lo rechazó para sostener enfáticamente que “El Negro brillaba en todo y por eso no está en este plano, está allá arriba”.

Luego reforzó aún más su devoción por Alberto Olmedo al responder sobre si “sobreviviría” a esta TV actual”: “El Negro sobreviviría a todo y más en estos momentos en que la gente está ávida del tipo de humor que hacía el Negro”.


Brodsky también reveló que “leencantaría actuar en la actualidad y sacar todo eso que temgo adentro” y sorprendió al confesar que le encantaría que la convoquen “para hacer un drama”.

Acerca de qué había en el “cuartito del fondo” donde “La Bebota y el Manosanta” ingresaban cuando engañaban al padre que encanaba Javier Portales, cuando este abandonaba la escena, Adriana reveló que “era un cuartito muy chiquitito” y que “Olmedo se ponía en una punta, ella en otra” y mirándose a los ojos él le ordenaba cuando ella "debía comenzar los gritos”.

Kavlin la inquirió sobre si Olmedo “alguna vez se te acercó” a lo que Brodsky desmintió enfáticamente: “No, no, no. Jamás” y enseguida se encargó de negar cualquier tipo de romance entre ambos en aquellos exitosos e inolvidables tiempos.