Whitney Houston: "La Voz" que siempre amaremos

Había nacido para triunfar, en cuna de talentos musicales. Desde que emitió sus primeros acordes vocales, su familia sabía que tenía un talento en casa. Y su madre, la destacada cantante de soul Cissy Houston, sabía que la pequeña seguía sus pasos.

Fue así que a los 11 años la llevaron al coro góspel infantil de la iglesia "New Hope Baptist" de Newark, New Jersey, y, más tarde, acompañaría a su madre en los conciertos. Además de su progenitora, fue influenciada por sus primas Dionne Warwick y Dee Dee Warwick y su madrina, Aretha Franklin.

A pesar de semejante talento, para llegar a tener su propio lugar, pagó derecho de piso. Apareció en el álbum de 1978 de Cissy, Think It Over; empezó a hacerle los coros a otros intérpretes reconocidos, como Chaka Khan, Jermaine Jackson, y Lou Rawls. A los 16, fue la voz principal de la banda de Michael Zager y tras posar como modelo para portadas, en 1982, hizo su primera grabación como cantante con el conjunto de Jazz-Funk Material. La canción era “Memories” y fue incluida en el álbum del grupo One Down.

No había dudas, había nacido para la música. El éxito llegó a “La Voz” (The voice, así la llamaban) en 1985 con su álbum Whitney Houston, que vendió 30 millones de copias y se convirtió en el álbum de debut con mayores ventas de una intérprete femenina en la historia. En 1987 lanzó su segundo álbum de estudio, que se convirtió en el primero de una artista femenina en debutar en el número uno en la lista de ventas Billboard 200.

En ese entonces, la morena desataba la locura con "I Wanna Dance With Somebody (Who Loves Me)". Whit quería bailar con alguien que la ame y endulzaba los oídos con exitosas baladas como "Saving All My Love For You" y "Greatest Love Of All". El mundo, se rendía a su Voz.

Se enamoró perdidamente del “niño rebelde” Bobby Brown en 1992, y fruto de ese amor nació su única hija: Bobbi Christina Brown. Los celos del cantante llegaron a los extremos. Celó la carrera de su mujer, ya que nunca logró conseguir su éxito y siempre fue “el marido de...”. Celó a su mujer por los besos de ficción con Costner. Eso la sumó en un profundo dolor.

Por aquel entonces, nacía otra voz privilegiada y rival: Mariah Carey. Las comparaciones fueron sorprendentes y odiosas a la vez. Y ambas sellaron la paz con un dueto inigualabla en “When You Believe” para el film “El Príncipe de Egipto”.

En cuanto a su carrera, su mayor hit fue “I Will Always Love You”, de la película que interpretó junto a Kevin Costner, “El Guardaespaldas”. Aquella canción reversionada del clásico de Dolly Parton enamoró a millones de amantes del cine y generó una verdadera locura de ventas y premios recibidos.

Pero su rockola incluye una larga lista de bellas interpretaciones: "One Moment In Time", "I'm Your Baby Tonight", "All The Man That I Need", "I'm Every Woman", "I Have Nothing", "Run To You", "Queen of the Night", "Exhale (Shoop Shoop)", "Step by Step", "My Love Is Your Love", "Could I Have This Kiss Forever" (con Enrique Iglesias), "If I Told You That" (con George Michael), “Whatchulookinat”, “One of Those Days”, “Million Dollar Bill”.

En 2002, mientras volvía con nuevo disco, se encontraba en medio de una etapa turbulenta de su vida, relacionada con los maltratos por parte de su marido y las drogas. La morena reconoció que consumía cocaína, marihuana y probaba todo tipo de sustancias. Como si fuera poco, peleaba con su propio padre por una demanda que éste le había hecho, pidiéndole 100 millones de dólares por una venta de acciones de la empresa familiar y porque sostenía que fue su representante durante mucho tiempo y que nunca recibió nada. Pero la muerte de su progenitor dio por terminado el juicio.

Whitney vivió altibajos en su carrera y en su vida. Después del furor de “I will...”, siguió grabando pero no tuvo la misma respuesta. Tuvo grandes ventas en Estados Unidos, pero no ocurrió lo mismo en todo el mundo. Como si fuera poco, su vida sentimental daba que hablar. En 2007, la separación de Bobby después de la violencia doméstica pareció resucitarla.

La música la salvaba... y fue justamente en la previa a los Grammy, el 11 de febrero de 2012 cuando Whitney cerró sus ojos en un hotel de Beverly Hills. Tenía sólo 48 años, la encontraron sin vida en la bañera de su habitación y la noticia recorrió los diarios y canales de todo el planeta. Demasiado joven para morir, demasiado talento perdido. Que en paz descanses, siempre te amaremos...

Por Claudia Seta