Cayó una lluvia de meteoritos

Miles de "cazadores" nocturnos de estrellas trasnocharon hasta que los venció el sueño, intentando ver la lluvia de meteoritos desde los techos y balcones los que viven en edificios, o en los espacios públicos otros, con difente suerte.

Gemínidas, que recibe ese nombre por originarse en la constelación de Géminis, comenzó a observarse cerca de las 23:00 y duraría hasta las 4:30 de la mañana según pronosticaron los expertos. El espectáculo lumínico se vió por debajo del cinturón de Orión -del que forman parte las Tres Marías-, a la derecha y abajo de la luna llena. Dependiendo de la ubicación del espectador, pudo presenciarse la caída hacia la Tierra de tres a seis "estrellas fugaces" por hora.

En las provincias del norte del país se pudo apreciar el fenómeno en plenitud, ya que en la Ciudad de Buenos Aires la gran contaminación del aire y un cielo parcialmente nublado atentaron contra la espectacularidad del hecho. Este tipo de procesos se origina cuando las colas de los cometas desprenden parte de su material y la Tierra, girando en su órbita, los encuentra.

En ese momento, los meteoritos se desintegran en la atmósfera de nuestro planeta debido a los efectos del rozamiento que sufren mientras caen. Cuanto más material tiene el meteorito más brillante se lo puede ver, ya que la luz que emiten se debe a ese rozamiento con la atmósfera terrestre. Los meteoritos ingresan a la atmósfera a una velocidad aproximada de 256 mil kilómetros por hora y aunque muchos se evaporan en el aire, otros pueden llegar a explotar.