Dolores Barreiro: "Mi secreto para estar espléndida es el yoga"

La modelo está embarazada de 6 meses y espera su tercer hijo varón. Dice que hace todo lo contrario que debería hacer una mujer en su estado y que en esa práctica oriental encontró el equilibrio justo para cuidar su cuerpo y espíritu.

A Dolores Barreiro no le gusta vestir con ropa de futura mamá durante sus embarazos. Tampoco hace cursos de preparto y admite que su obstetra la reta demasiado.Viajó a la India con una panza de ocho meses firmando una claúsula de propia responsabilidad ante la línea aérea e insiste en tomar sesiones de masajes prohibidas para mujeres en su estado. “Es complicado ponerme boca abajo, pero me las ingenio para poner muchos almohadones”, confiesa. La modelo del staff de Pancho Dotto, admite su rebeldía y lleva la tercera de sus panzas con valerosa frente alta: “Suelo tener embarazos divinos durante los cuales me siento muy bien. No perder la calma y ser sano, esas son mis claves”.
Barreiro cree que un embarazo es de por sí una gran experiencia pero sostiene que la primera siempre es la más intensa. “Disfruté mucho de la espera de cada uno de mis dos hijos”, relata, “pero me arrepiento de haber dejado pasar tanto tiempo entre uno y otro. Por eso ahora nos apuramos. Uno tiende a perder la cancha”.

Entre los nombres que se barajan, Milo seria el preferido hasta el momento, aunque Barreiro opte por el misterio. “Será varón, pero aún no hemos decidido su nombre”, confesó Dolores, “solemos hacerlo a último momento, aunque como dicen que la tercera es la vencida, quién dice no lo definamos en cualquier momento”.

—Y la tercera es la vencida o ¿vendrá un cuarto hijo?

—Siempre quisimos tener tres hijos, pero creo que es un número justo. Tres es un montón, pero a la vez, dos es muy poco.

-¿Qué le ha enseñado la experiencia?

—Que cada vez que llore no debo darle la teta. Eso me ha costado mucho con mis otros dos hijos. Aunque mi familia no me crea, esta vez será así. Es que saben que finalmente termino siendo demasiado flexible. Me resultó difícil despegarlos de mí, por ejemplo, al menor le cuesta dormir si no hay nadie a su lado.

—¿Hubiese querido tener una niña?

—Todo el mundo me insiste con lo de tener la nena, pero a mí me gusta que sean tres varones. Tampoco corresponde que yo piense cómo quiero que sean.

—¿Hace yoga para embarazadas?

—El yoga es un descubrimiento fantástico en mi vida, me gusta cuidar mi salud física y espiritual pero no caigo en el fanatismo. Igualmente sé que es muy bueno para las embarazadas, su organismo y circulación, aunque se limite desde el punto de vista técnico, porque hay posturas que se deben obviar.


—¿Cómo hace para mantener ese cuerpo después de dos embarazos?

—Mi secreto es la genética y el yoga. También me he recuperado de los otros dos embarazos con gimnasia exigente. Trataba de cruel a mi personal trainner, pero comprendí que era el precio que debía pagar. Después de todo, cuidarme nunca fue tan ajeno a mí, soy una chica muy sana.

—¿Puede hacer una breve autocrítica maternal?

—Como mamá soy muy obsesiva y detallista con todo. Pero por otro lado soy muy alegre y jocosa, sin dejar de ser exigente. Finalmente siempre termino cediendo. Mis hijos son muy caprichosos y me pueden. Si ‘Salvita’ se despierta a las 3 de la mañana y me dice ‘por favor mami, dame otra memi’, no puedo castigarlo.


Fuente: Revista Caras.