Analizan remitir la causa contra obispo acusado de manosear a una joven
Ante esta situación, el fiscal demoraría la decisión de citar a probables testigos, entre conductores y pasajeros del ómnibus, hasta tanto defina la competencia.
El obispo Uriona fue detenido ayer en la ciudad de Córdoba al arribar en ómnibus proveniente de Mendoza luego de que una joven, con quien compartía el asiento, denunció que había sido manoseada. Según la denuncia, el presunto abuso habría ocurrido en la madrugada del jueves cuando un colectivo de la empresa San Juan-Mar del Plata transitaba por Río Cuarto, razón por la cual la causa sería enviada a los tribunales de esa población, que dista 230 kilómetros de la capital provincial.
La detención de Uriona se concretó alrededor de las 7.30 del jueves en la terminal de ómnibus cordobesa a poco de arribar en el colectivo en el que también viajaba la joven denunciante, de 24 años, entre otros pasajeros.
El religioso, de 50 años, permaneció detenido hasta alrededor del mediodía, cuando el fiscal Moyano le concedió la libertad porque el delito que se le imputa, que es abuso sexual sin acceso carnal, es excarcelable. (Télam)
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CALIFICAN DE INFAMIA LA DENUNCIA CONTRA EL OBISPO URIONA
El vicario general de Añatuya, Hernán González Cazón, calificó hoy de "un infamia" la denuncia que derivó en la detención y posterior liberación del obispo de esa localidad, Adolfo Armando Uriona, acusado de manosear a una joven en un ómnibus de larga distancia.
"Quienes conocemos a monseñor Uriona, sabemos de su hombría de bien y estamos seguros que todo se trata de una infamia", dijo el religioso. El obispo fue denunciado ayer por una joven de 24 años, quien dijo que el sacerdote la manoseó durante un viaje en colectivo, desde Mendoza a la ciudad de Córdoba.
En diálogo con los periodistas de la ciudad de Añatuya, población distante a 160 kilómetros al sureste de la capital provincial, González Cazón se mostró seguro de que "se declarará la inocencia de Uriona" aunque admitió que será difícil "limpiar esta suciedad que se arrojó sobre su persona".
"Uriona es un hombre importante para la diócesis de Añatuya, viene de la congregación de Don Orione, que es sacrificada y exige un servicio muy grande a los pobres y enfermos y espero que se aleje este exabrupto, porque estamos seguros de que él no tiene nada que ver", añadió.
En tanto, la comunidad de Añatuya aún no salía de su asombro por la denuncia que involucra al prelado en una causa de presunto "abuso deshonesto" en perjuicio de una joven estudiante universitaria de 24 años.
A poco de conocerse la noticia, los fieles se concentraron e iniciaron una cadena de rezo con muestras de solidaridad para el obispo que aún no arribó a la ciudad de Añatuya.
"Monseñor Uriona aún no llegó al obispado, tampoco se comunicó con nosotros ni anunció su regreso", fue la única respuesta de los religiosos que viven en el edificio del Obispado de Añatuya, al ser consultados sobre el paradero del sacerdote. (Télam).-