Bussi, de alta
El represor Antonio Bussi volvió a ser trasladado a la dependencia militar donde cumple prisión preventiva, luego de permanecer durante tres días internado en una clínica de Tucumán por un episodio de arritmia.
Bussi fue dado de alta anoche en el sanatorio en que se encontraba internado desde el jueves, y trasladado a los ex arsenales Miguel de Azcuénaga, donde continuará preso por las causas en las que está acusado de violaciones a los derechos humanos durante la dictadura militar.
Después de las 20 y luego de que los médicos constataron que se habían normalizado las pulsaciones luego de la arritmia que sufrió la noche del viernes, el ex gobernador fue retirado de la clínica privada.
Bussi regresó a la dependencia militar, ubicada en las afueras de la capital, donde también se encuentra alojado el ex comandante del III cuerpo de Ejército, Luciano Benjamín Menéndez.
También podría interesarte
Entre el jueves y el viernes, Bussi había sido sometido a diferentes estudios vinculados con los problemas cardiovasculares que padece, y consiguieron compensar su cuadro, por lo que obtuvo anoche el alta médica y volvió a prisión.
El represor está detenido por orden del juez federal Jorge Parache desde octubre de 2003. Prácticamente todas las semanas debe concurrir a los Tribunales Federales para declarar en las numerosas causas judiciales en marcha por violaciones a los derechos humanos.
La defensa de Bussi insiste en que debe ser trasladado a Buenos Aires para poder ser atendido por sus médicos de cabecera, pero el perito de la Cámara Federal de Apelaciones, Raúl Asial, confirmó que médicos tucumanos pueden controlarlo al militar retirado.