Finalmente, el "gordito" inglés de 98 kilos seguirá viviendo con su madre

Pesa el triple del promedio de los niños de su edad. Las autoridades británicas se habían planteado quitarle su custodia a su progenitora, pero optaron por no hacerlo. Ahora, a ponerse a dieta.

Cada día devora vorazmente cuatro paquetes de papas fritas, varias tabletas de chocolate, galletas y golosinas: Connor McCreaddie tiene ocho años y pesa 98 kilos, pero las autoridades británicas decidieron el jueves que no van a separarlo de su familia.

Las autoridades de protección de menores de Wallsend, norte de Londres, británicas - que culpan a la familia del sobrepeso del "pequeño" - se reunieron el martes con la familia de Connor, que pesa el triple del promedio de los niños de su edad.

Las autoridades habían indicado que podían decidir retirar la custodia del menor ante los peligros que corre debido a su exceso de peso, como pedían algunos expertos, que señalan que su estado puede causarle problemas cardiovasculares y diabetes.

Las autoridades examinaron varias soluciones, entre ellas la posibilidad de hacerse cargo del menor a menos que su familia consiga frenar el apetito del niño.

Pero su decisión fue que el niño - que debe dormir en el piso, porque ha roto ya cuatro camas- permanecerá con la familia.