Gran Hermano: se fue Pachu Peña y echaron a Dolores Moreno
"Arriba, es lo que yo quería, che" atinó a soltar Dolores mientras, sonrisa de oreja a oreja, se abrazaba con una llorosa Mariana Otero.
La modelo, el cachet más alto del envío, consiguió su objetivo ya que quería volver a las calles y a su famila para reencontrarse con su hijo Felipe a quien más extranó durante 14 días de encierro.
De este modo, sobrevivien en el juego, Pablo Tamagnini, Luis Vadalá y Mariana Otero. Con diferentes porcentajes ya que recibieron el 24,2 %, 15 %, 9.3% de los votos.
Previamente a la Casa la sacudió un hecho inesperado.
“Sorpresiva, un verdadera bomba acaba de explotar en la Casa, por decisión propia acaba de dejar la Casa”, comentó Jorge Rial tras la partida del cómico rosarino.
“Yo no lo supe jugar, quédense tranquilos” comentó Pachu tras determinar su partida. La distancia con su familia y el amor por su hijos precipitó la decisión.
El alejamiento del participante abre la puerta otro pseudo-famoso. Este lunes durante la jornada del debate lo presentarán en sociedad.
Tras los encontronazos y acusaciones entre Nino Dolce y Luis Vadalá por su supuesto pasado oscuro durante la dictadura militar, la Casa viró hacia climas más relajados como el del sábado durante la denominada fiesta temática.
Allí entre otras situaciones se dio el blanqueo que todos esperaban. El secreto a voces de la atracción entre Lissa Vera y Hernán Caire tuvo su momento de decisión.
Y la que la tomó la iniciativa fue la ex Bandana quien arrinconó al conductor bailantero. Así, entre cuchicheos y arrumacos, el ex de Nazarena Vélez esquivó la oferta: “Te quiero como amiga”, le confió entre otras definiciones del mismo tenor. Y a buena entendedora, esas palabras.
Carlos Nair fue protagonista involuntario de escenas dignas de un envío no acorde los lineamientos de una emisora que se digna de ser “el canal de la familia”.
Mientras el supuesto hijo del ex presidente Menem reposaba en uno de los sillones, exhausto y con restos de pintura en su cara, Mariana Otero, jugueteó con sus prensa íntimas y dejó al descubierto la anatomía viril. Púdicos pero fieles al slogan las partes pudendas fueron "censuradas" como resaltaba el cuadro que colocaron sobre su zona pélvica.
Comentarios sobre el tamaño desmesurado dominaron la escena entre risas y epítetos tales como “menos mal que está desmayado, porque vivo no se como será” o el “monstruo del lago Ness”.
La Otero, jocosa por demás lo calificó de “pedazo de termo”.
Con la ida de Moreno, hay alivio por partida doble. De la modelo que se reencontrará con su pequeño hijo y de la producción que se ahorrará de abonar el cachet más alto del envío. Con su partida Peña abandonó casa y sueldo.
Tras su episodio violento con Vadalá y luego de haber acaparado la atención durante varios días por su bizarro proceder, Nino Dolce bajó su perfil y casi ni se notó su presencia.
Uno que claudicó, otra que se va y unos 180 mil pesos ahorrados.
Clink, caja. Y todos contentos.
