Familiares del empresario secuestrado exigen a los captores "prueba de vida"

Los investigadores están preocupados porque no hay novedades de Franco Andreola desde el domingo. Los secuestradores piden 500 mil dólares de rescate. Ellos dicen haber dejado una prueba de vida en la zona sur del Conurbano, pero aún no fue encontrada.

Los investigadores del secuestro del empresario del transporte Franco Andreola estaban preocupados hoy porque no encontraron una prueba de vida que los captores dijeron haber dejado en la zona sur del conurbano y porque no se registraron nuevas comunicaciones desde el domingo último.

Dos fuentes con acceso a la causa indicaron a Télam que en los seis días que Andreola lleva secuestrado, los captores sólo se comunicaron con la familia en dos oportunidades.

La primera llamada se produjo el viernes a última hora de la tarde para anunciar que Andreola estaba secuestrado y pedir como rescate 500 mil dólares.

La segunda comunicación fue el domingo y en esa oportunidad, según las fuentes, los secuestradores anunciaron que habían dejado una prueba de vida en un "puesto" de la zona sur del conurbano.

Supuestamente, se trataba de una carta manuscrita por Andreola, pero en el lugar indicado por los secuestradores no encontraron nada.

"Los secuestradores ni siquiera volvieron a llamar para confirmar si habían encontrado la prueba de vida. Sólo hubo dos llamados y desde el domingo no tuvimos novedades, estamos preocupados, no son improvisados", dijo a Télam uno de los investigadores.

En tanto, la causa continuaba hoy a cargo del fiscal de instrucción porteño César Troncoso, quien aún no se había declarado incompetente, ni girado el expediente a la Justicia Federal, con competencia en la investigación de secuestros extorsivos.

Frente a la casa de Andreola, en el barrio Inglés de Caballito, se mantenía un fuerte hermetismo respecto al caso y ni siquiera se advertían movimientos de entrada y salida de familiares.

El episodio ocurrió el miércoles último cerca de las 23:45, cuando un grupo de empresarios del transporte de larga distancia se encontraba cenando tras una reunión en un quincho de la firma El Rápido San José, que pertenece a la compañía Flechabus, en la calle Río Cuarto 1963 del barrio porteño de Barracas.

En medio de la cena, al menos siete delincuentes ingresaron al lugar, que está en un galpón de la firma, y con armas amenazaron a todos los presentes, a quienes les sustrajeron dinero y teléfonos celulares.

Ninguno de los comensales opuso resistencia, de manera que la banda estuvo sólo 15 minutos en el lugar y hasta entonces todos creían que se trataba de un simple robo.

Pero los miembros de la banda preguntaron quién era el dueño de un automóvil Mini Cooper estacionado en la puerta del galpón.

Andreola les dijo que era de él y les mostró la llave, pero los delincuentes no fueron al auto, sino que tomaron al hombre por la fuerza y se lo llevaron en uno de los vehículos en los que habían llegado a la empresa.

Los dueños de Flechabus, los hermanos Raúl y Guillermo Derudder, y los otros empresarios presentes denunciaron el hecho de inmediato en la comisaría 30, con jurisdicción en la zona, pero la policía no pudo alcanzar a los delincuentes y dieron intervención a la División Antisecuestros de la Policía Federal.

Una de las hipótesis de los investigadores es que los secuestradores se equivocaron de persona, ya que uno de los hermanos Derudder había vendido dos días antes un Mini Cooper igual al que tiene Andreola.

Tras el secuestro, los captores estuvieron casi un día y medio sin comunicarse con ningún allegado al empresario, pero el viernes último le pidieron a la familia 500.000 dólares de rescate para liberarlo sano y salvo.

Según las fuentes de la investigación, Andreola es un empresario que comercializa en la Argentina las carrocerías Busscar, de origen brasileño.

La firma, con sede en Joinville, Santa Catarina, fabricó los primeros micros de larga distancia de dos pisos y vista panorámica, los cuales comenzaron a ser utilizados en el país en la década del 90 por las principales empresas de transporte.

La empresa es la más importante del rubro en Brasil, pero también exporta micros de ese tipo y minibuses a todo el mundo