Ordenan arrestar a un policía que se apropió de la vivienda de un detenido
La Justicia de Morón ordenó la detención de un oficial de la Policía bonaerense que
está acusado de integrar una asociación ilícita a través de la cual se apropió de la casa de un hombre cuando estaba preso y que trabajaba en complicidad con un abogado falso.
El imputado es el teniente Alberto Casco, jefe de calle de la comisaría de Castelar Norte, en la zona oeste del conurbano, quien ya fue declarado prófugo por el juez de Garantías de Morón Ricardo Fraga porque no fue hallado en su casa cuando lo fueron a detener,
informó una fuente judicial.
También podría interesarte
El caso se inició luego de que el 24 de mayo un hombre identificado como Walter Balcarsa fue detenido acusado de participar en el crimen de Analía Aguerre, asesinada de un balazo durante una salidera bancaria en Merlo.
La sospecha de los investigadores es que el teniente Corso involucró en el caso a Balcarsa, lo detuvo y luego lo extorsionó con la propuesta de quedarse con su casa de Ituzaingó, ubicada en Cuyo al 2200, a cambio de desvincularlo del crimen de la mujer.
Al mismo tiempo, el fiscal de Morón Fernando Bellido, a cargo del caso, determinó que Corso estaba vinculado con el defensor de Balcarsa, Silvio Hipólito Cascella, un falso abogado "sacapresos" descubierto en noviembre último.
La fuente consultada explicó a Télam que hay numerosas llamadas telefónicas que comprometen al policía y al falso letrado.
Cascella se dedicaba a liberar presos de comisarías del partido de Morón, entre ellas la que pertenecía Corso, y se descubrió que había montado un estudio jurídico "trucho" gracias a los contactos con los policías de la zona.
El hombre se desempeñaba como letrado con una credencial falsificada del Colegio de Abogados de Mar del Plata e intervino en numerosas causas, algunas de las cuales tuvieron que declararse nulas.
Una de ellas es la de Balcarsa, quien pese a estar imputado de homicidio, debió ser excarcelado.
La investigación contra el falso abogado comenzó cuando en las fiscalías de Morón se recibieron numerosas denuncias de personas que aseguraban que habían sido estafadas por Cascella porque le habían pagado y nunca había avanzado en sus expedientes.
Al avanzar la pesquisa, se determinó que el falso abogado tenía contactos en seccionales, especialmente en la de Castelar Norte, donde los propios policías lo recomendaban a los detenidos alojados allí.
En noviembre pasado, el falso estudio fue allanado por el fiscal Bellido, instructores judiciales de Morón y personal de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense.
Allí de determinó que Cascella usaba la credencial de Carlos Casella, un defensor matriculado en Mar del Plata a quien el estafador le utilizaba el número de tomo y folio (IV/400) para poder ejercer la profesión, aprovechando que sólo tenía una letra
de diferencia con su apellido. Cascella estuvo detenido, luego fue liberado y el pasado 2 de diciembre sufrió un extraño atentado en su casa, cuando balearon el frente de su propiedad y una de las esquirlas hirió a su mujer.
Ahora podría ser imputado por la misma figura que el policía, asociación ilícita, y en ese caso volvería a prisión.
Otros policías de Castelar ya fueron investigados por maniobras similares y hay dos expedientes abiertos contra dos ex policías, el ex teniente Carlos Maciel, ya exonerado de la fuerza, y el sargento Daniel Lencina, quienes habrían tenido relación con las maniobras.