El Picadero resiste

El edificio porteño donde funcionaba el tradicional Teatro Picadero finalmente no será demolido, según lo anunciaron el Gobierno de la Ciudad y los dueños del predio, que además resolvieron recuperar el lugar para fomentar las actividades artísticas.

La noticia fue difundida por la ONG "Basta de Demoler", que fue la que, en diciembre pasado, había presentado ante la justicia una acción de amparo solicitando que se frenaran los trabajos.

Poco después, la información fue confirmada por la Subsecretaría de Patrimonio Cultural del gobierno porteño, por lo que el tradicional teatro seguirá existiendo.

"Después de varias reuniones entre BdeD, la empresa D Buenos Aires (propietaria del edificio en peligro desde 2006) y el Gobierno (Patrimonio Cultural), se llegó a un acuerdo por el cual se preserva el actual edificio, y se recupera la sala mediante un convenio con el Ministerio de Cultura del gobierno porteño", explicó la ONG a través de un comunicado de prensa.

En ese sentido, enfatizó que "la solución de este tema muestra que es posible compatibilizar el interés particular (la empresa) con el interés común de la ciudad de preservar su memoria e historia a través de la conservación de su patrimonio arquitectónico y cultural".

A partir de la presentación judicial, la magistrada a cargo del tema, Alejandra Petrella, abrió un espacio de negociación entre las partes, donde luego de varias reuniones, se llegó a un acuerdo.

"El convenio, suscripto el pasado 18 de abril y homologado el 16 de mayo, deja sin efecto la demolición del Teatro del Picadero, aplica el cumplimiento de la Ley 14.800 y fija responsabilidades respecto a la administración del Teatro, que correrá por cuenta de D Buenos Aires", detalló la Subsecretaría de Patrimonio Cultural.

Además, puso de relieve que "el acuerdo celebrado sella asimismo el compromiso de la empresa de recuperar y preservar la fachada original y el ámbito teatral del predio, y contempla la eventual cesión en comodato al Ministerio de Cultura del Gobierno de la Ciudad".

En ese contexto, la ONG recordó que la ley 14.800, promulgada en 1959, declara de interés nacional a la actividad teatral en todas sus formas y ramas y determina que "en los casos de demolición de salas teatrales, el propietario de la finca tendrá la obligación de construir en el nuevo edificio un ambiente teatral de características semejantes a la sala demolida".

Ubicado en el hoy pasaje peatonal Enrique Santos Discépolo 1847, el Teatro Del Picadero, que fue un símbolo de la resistencia cultural a la dictadura, sobrevivió 6 de agosto de 1981 a un ataque con tres bombas incendiarias.

Hasta ese momento, en el Picadero se hizo Teatro Abierto, con obras de autores como Aída Bortnik, Carlos Gorostiza y Roberto Tito Cossa.

Luego de ese hecho, la sala estuvo cerrada durante dos décadas y su reapertura se concretó recién en agosto de 2001, aunque en la actualidad, el edificio estaba cerrado y tapiado.