Chile: Cristina y Bachelet reivindicaron la paz entre ambos países
El enviado papal, el cardenal Odilio Sherer, presidió este viernes por la mañana una misa en la catedral de Punta Arenas para conmemorar los 30 años de la mediación de Juan Pablo II que evitó una guerra entre Argentina y Chile por el conflicto del Beagle.
Sherer, arzobispo de San Pablo, Brasil, fue designado por Benedicto XVI para que lo represente en el acto conmemorativo que se realizará este mediodía en Monte Aymond, que presidirán las mandatarias de ambos países, Cristina Fernández de Kirchner y Michelle Bachelet, quienes arribaron ayer a esta ciudad.
La delegación pontificia se completa con los nuncios apostólicos en Argentina y Chile, monseñor Adriano Bernardini y monseñor Giuseppe Pinto; y los representantes de los Episcopados de ambos países, el obispo de Río Gallegos, Juan Carlos Romanín; y el obispo emérito de Rancagua, Francisco Javier Prado Aránguiz, quienes concelebraron la misa.
Participaron de la celebración eucarística el canciller de Chile, Alejandro Foxley; la ministra de Cultura de ese país, Paulina Urrutia y otros funcionarios que integran la comitiva que acompaña a Bachelet, así como delegaciones de escuelas de la ciudad, efectivos militares y la comunidad católica de Punta Arenas que colmó el templo ubicado al lado de la intendencia regional.
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Durante su homilía, el arzobispo de San Pablo transmitió el saludo de Benedicto XVI y destacó "el gran aprecio del Santo Padre por estos países y su especial estima por los pueblos argentino y chileno".
Asimismo, exhortó a "celebrar este acontecimiento de paz y amistad entre dos pueblos" que significará el acto de este mediodía, el cual -dijo- será "una señal y un testimonio de que el objetivo de la mediación fue alcanzado", y llamó a que "se profundicen siempre más" las relaciones bilaterales.
Finalmente, se recordó en particular la figura del cardenal Antonio Samoré, el mediador enviado por Juan Pablo II a la zona del conflicto, de quien Sherer señaló que fue un "paciente e incansable negociador" y explicó que la fórmula jurídica de la mediación estuvo basada en "la justicia, la amistad y el desarrollo de los pueblos".
Tras la misa, las comitivas se dirigieron por vía terrestre a Monte Aymond, ubicado a 170 kilómetros de Punta Arenas, mientras que las Presidentas lo hicieron por vía aérea a las 11.