En medio de rumores de posible quiebra, General Motors echa más gente
El constructor automovilístico estadounidense General Motors (GM), que multiplica sus esfuerzos para reestructurarse sin pasar por una bancarrota, suprimirá 1.600 puestos de empleados administrativos, informó este lunes a la AFP un portavoz empresarial
"A partir de esta semana, GM enviará correos a 1.600 empleados administrativos para comunicarles su despido de aquí al 1 de mayo", dijo el portavoz Tom Wilkinson.
Estas supresiones de puestos de trabajo son parte del objetivo de la empresa, divulgado en febrero, de suprimir 3.400 empleos administrativos este año en Estados Unidos, recordó Wilkinson.
Barack Obama le dio tiempo hasta el 1 de junio a General Motors para presentar un plan de reestructuración coherente que garantice su supervivencia, porque si no lo hace, tendrá que declararse en bancarrota.
Sin embargo, el director general de GM, Fritz Henderson, manifestó que prefiere que la empresa que preside sea reorganizada al margen de un tribunal de quiebras para demostrar que puede sobrevivir para abonar los 13.400 millones de dólares en préstamos del Estado.
Claro que querer no siempre es poder. Por eso, el ejecutivo admitió que la opción hacia la protección de quiebras aparece como cada vez más probable.
Henderson sostuvo que tendría que cerrar otras plantas además de las cinco que ya anunció y que suprimirá más empleos, al margen de los 47.000 despidos que GM anunció hace dos meses. Además, reveló que hay posibilidades de vender unidades que fabrican ocho marcas, entre ellas, Hummer, Saab y Saturn.
De llegar a la quiebra, los expertos creen que el período en cuestión lo tendría al menos medio año libre de sus problemas.