Según ADN, chico de 15 años asesinó a Leonela
El ADN encontrado en el cable que fue usado para asfixiar a Leonela Aguirre, una niña violada y ahorcada en marzo en la ciudad chubutense de Puerto Madryn, se corresponde con el de un adolescente de 15 años que figura como sospechoso del crimen, informó hoy el fiscal Daniel Báez.
Además, una huella dactilar que fue hallada en la bolsa de nylon que cubría la cabeza de la víctima también coincide con la del mismo chico, quien por su edad no puede ser imputado en el expediente y se debe definir si queda bajo tutela de sus padres o es enviado a un instituto.
El fiscal Báez explicó a la prensa que "el material de ADN es de un perfil masculino, perfectamente definido, que fue comparado en forma concluyente con el perfil de varios sospechosos, entre veinte y veinticinco personas, y dio una coincidencia con un menor de edad".
Pese a que Báez no quiso dar mayores datos por tratarse de un menor de edad, dio a entender que el chico habría interceptado a Leonela cuando salía de la escuela y lo que ahora se investiga es dónde se cometió el homicidio.
También podría interesarte
Tal como indica el régimen penal de minoridad, el chico quedará ligado al proceso ante estas pruebas contundentes, se le asignará un defensor y se informará a sus padres de la situación, pero no se puede dictar ninguna medida que implique la restricción a su libertad.
El adolescente no está obligado a prestar testimonio, pero si lo desea, podría aportar elementos al proceso.
Tras conocerse el resultado del ADN, el fiscal realizó un allanamiento en la casa del sospechoso y en una agencia de seguridad ubicada al lado de la casa del único detenido por este caso, Pablo Bell (37).
Los investigadores sospechan que la nena pudo haber estado allí antes de ser asesinada.
Leonela fue vista con vida por última vez el 17 de marzo último, cuando cerca de las 17 se fue sola de la escuela rumbo a su casa, situada a pocos metros.
Según el testimonio de algunos alumnos, la niña "se agachó para atarse los cordones y luego no se la vio más" hasta que su cuerpo apareció a las 6.30 del día siguiente en un contenedor.
La autopsia reveló que la causa de la muerte fue "asfixia por estrangulamiento" y los forenses establecieron que el o los asesinos utilizaron un cable para ahorcar a la niña.
En la causa, hay una testigo clave que observó con claridad cuando la nena estaba por ingresar a la casa de Bell.
Tras esa declaración, el acusado fue preso y cumplió prisión preventiva en una cárcel, hasta que el 23 de abril se le concedió arresto domiciliario porque por entonces no había pruebas suficientes para considerarlo autor del hecho sino partícipe.
Para el fiscal Báez, "el imputado tuvo el tiempo necesario para limpiar la escena del crimen, pero sin dudas los pocos o pequeños rastros que dejó Leonela Aguirre lo incriminan seriamente".
Es que de los peritajes realizados hasta ahora surgió que existiría material genético de Bell en el pantalón que tenía puesto Leonela cuando fue encontrada asesinada.
Además, en el auto del sospechoso -una cupé Renault Fuego- se halló un cabello compatible con el de la nena y el tapizado de la butaca del vehículo, que tiene un diseño tramado con rectas, quedó marcado en las piernas de la chica.
Ahora, con el resultado del ADN, los investigadores creen el adolescente interceptó a la niña tras salir de la escuela, la llevó a algún lugar con Bell y luego allí o en el auto del detenido fue violada y asesinada.