Un día en la vida de Celeste, no vidente, con su perra guía
En la Argentina no existe una ley que permita el desplazamiento de personas ciegas con perros guía
. El perro guía es un instrumento de inapreciable utilidad para los demás, pero es de suma importancia para las personas con esta discapacidad. La mejora en su calidad de vida es sustancial. No solo desde el punto de vista de los vínculos, con el entorno y la autonomía, sino afectiva.
Canal 26
te muestra como es un día en la vida de Celeste, una joven ciega que vive con su labradora Any, su perra guía de 6 años.
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“A Any la conocí en 2008. La fui a buscar a EE.UU porque es uno de los pocos países que tiene un centro que entrena perros para cualquier parte del mundo”, contó Celeste ya que en nuestro país no existen de este tipo de centros de entrenamiento.
“Mi vida cambió mucho con esta perra. Ella bordea los obstáculos que hay, mira mucho el tránsito y me ayuda a esquivar los pozos”, relató.
Pero más allá de la ardua tarea que realiza la perra hay muchas veces se dispersa por culpa de la gente. “No se los puede tocar porque se distraen y ellos están trabajando”, remarcó Celeste, quien debe lidiar con gente que intenta tratar a Any como “una mascota”.
Celeste recordó que tuvo que pasar 26 días en Estados Unidos con ella para el entrenamiento: “Las órdenes se las tengo que dar en inglés porque ella fue entrenada en ese idioma. Le indico que se siente, que doble a la derecha, a la izquierda, que busque la puerta, el ascensor...”
Pero los lugares a los que puede ingresar con su labradora son limitados. De hecho,
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intentó ir a un bar con Celeste y su perra pero no pudo entrar. “A los clientes le molesta”, se excusó el dueño. Por suerte. Celeste recordó que no en todos los bares y restaurantes es igual. “Hay algunos que tienen sentido común y te dejan”, destacó.
En el subte se puede manejar sin impedimentos. “Any siempre se sienta acá adelante (frente al andén). Esto lo hace para marcarme que no puedo avanzar”. El subte es el medio de transporte que Celeste utiliza todos los días para ir a su trabajo. “Me desempeño como call center hace 5 años. Actualmente estoy haciendo un relevamiento de datos en empresas de sistemas”, contó. Allí tiene un espacio preparado especialmente para Any, donde recobra energías para emprender la vuelta a casa.
El proyecto de ley nacional de perros guía acaba de obtener dictamen en la Cámara de Diputados, en la Comisión de Discapacidad. “Ahora esperamos que pase lo mismo en las Comisiones de Salud y Legislación General para que el proyecto pueda pasar al recinto”, concluyó.
