Declaran "insano" al tirador serial de Belgrano: deciden si va a juicio

Martín Ríos, conocido como el tirador serial de Belgrano, fue declarado "insano e incapaz" por la justicia civil, por lo que ahora un tribunal penal debe definir si lo juzga o no por el crimen del joven Alfredo Marcenac, ocurrido en 2006 en ese barrio porteño.

El abogado Angel Ramallo, representante de Ríos, dijo a Télam que la decisión la adoptó la jueza civil Norma Abou Assali de Rodríguez, quien en base a nuevos peritajes psiquiátricos consideró que el imputado es "esquizofrénico".

"Las pericias dicen que es esquizofrénico, que tiene una enfermedad de larga data que se complicó por el uso de drogas y que es peligroso para sí y para terceros", explicó el letrado.

Además, la magistrada le designó a Ríos una curadora oficial porque "no es dueño de sus actos, no puede votar, vender, comprar ni realizar nada", agregó Ramallo, quien había solicitado que ese rol lo cumplieran los padres de su cliente, pero el pedido fue rechazado.

La decisión que declara "insano e incapaz" a Ríos fue entregada esta mañana por su abogado al Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 26, el cual tiene previsto juzgarlo en marzo próximo por el homicidio de Marcenac.

Ahora los jueces deben decidir si realizan o no el debate, ya que ellos ordenaron otros peritajes de los que surgió que el acusado, si bien tiene una enfermedad mental, comprende lo que es enfrentar un juicio oral.

El joven permanece internado en el Hospital Neurosiquiátrico Borda y recibe un tratamiento desde hace cuatro años.

El 6 de julio de 2006, Ríos, que se hallaba en la avenida Cabildo y José Hernández, extrajo un arma de fuego y disparó al menos 13 proyectiles que provocaron la muerte a Marcenac y heridas a otras seis personas.

Tras ser detenido, se comprobó que también había herido a una joven en un bar, a pasajeros de un colectivo y baleado a un tren, también en Belgrano.

El joven fue sometido a decenas de peritajes por parte de expertos particulares y del cuerpo médico forense que tenían diferentes posturas acerca de su inimputabilidad.

En julio de 2009, el TOC 12 entendió que Ríos no comprendió la criminalidad de sus actos ni pudo dirigir sus acciones, lo declaró inimputable y dictó su absolución, lo que fue apelado por el fiscal Carlos Jiménez Bauer y los familiares de las víctimas.

En abril pasado, la Cámara de Casación Penal anuló ese fallo y ordenó que se realice un nuevo juicio por entender que el tribunal "ha considerado en forma fragmentaria los elementos de juicio, ha incurrido en omisiones y falencias, prescindiendo de una visión en conjunto y de la necesaria correlación entre sí de las pruebas y elementos indiciarios".

Sostuvo que la declaración de inimputabilidad "no encuentra hilación con lo que surgió de las primeras entrevistas" con Ríos, en las que se concluyó que "era una persona que tenía noción de lo que le convenía ocultar o decir", con "capacidad intelectual para poder declarar", o "entender que estaba imputado de un delito" y "su importancia".