Distonía

Más de 40 mil argentinos padecen de esta enfermedad neurológica que afecta...

Por Canal26

Miércoles 2 de Julio de 2008 - 00:00

...a los músculos y que en muchos casos se confunde con simples tics, según explicaron especialistas médicos.

Las distonías abarcan aquellas enfermedades neurológicas caracterizadas por la contracción involuntaria y sostenida de uno o varios grupos musculares.

"A menudo, origina posturas anormales y/o movimientos de torsión de una o más partes del cuerpo, que alteran la vida de la persona y, si el cuadro es severo pueden ocasionar discapacidad", comentó Alejandro Andersson, neurólogo del Instituto de Neurología Buenos Aires (I.N.B.A.).

Los médicos advirtieron que hombres y mujeres, de cualquier edad, pueden sufrir distonías. Las regiones del cuerpo más afectadas son la cabeza, la cara, el tronco, los brazos y/o las piernas.

Las contracciones musculares pueden ser leves o más severas, dificultando o impidiendo realizar movimientos voluntarios como caminar, hablar, comer, causando a veces episodios de mucho dolor. Dado que las manifestaciones pueden ser en ocasiones confundidas o subestimadas, es probable que una parte de la población padezca distonía sin saberlo y por ende sin recibir el tratamiento adecuado.

En muchos casos, un blefaroespasmo (contracción sostenida de los músculos de los párpados) se confunde con un problema oftalmológico o tics, cuando en realidad es neurológico. "La experiencia diaria en el consultorio médico muestra fuertes indicios de que la población de pacientes con distonía es mucho mayor que lo que se sospecha, que en ocasiones no se diagnostica como tal y que esto lleva a demoras en recibir un tratamiento adecuado", detalló el especialista.

Si la distonía comienza en la infancia es frecuente que se extienda a distintos grupos musculares, por lo que resulta clave el diagnóstico y tratamiento precoz de esta afección, lo que evitaría las complicaciones ocasionadas por la presencia sostenida de posturas anormales.

El diagnóstico de la distonía es clínico, ya que estas posturas y movimientos involuntarios son detectados al examinar al paciente. Por otra parte, el médico debe indagar minuciosamente el árbol familiar, buscando antecedentes de distonía en sus distintas modalidades: focal, segmentaria y generalizada.

Una vez identificado el tipo de distonía, el neurólogo en base a su experiencia podrá indicar la mejor terapia según cada caso. Si la distonía es focal y afecta a un grupo limitado de músculos, la aplicación de la toxina botulínica (Botox) ha demostrado ser la primera opción de tratamiento seguro y efectivo, según especialistas. "Debe ser aplicado por profesionales entrenados en su uso y debe ser repetido aproximadamente cada tres o cuatro meses al año", enfatizó Andersson.

Esta toxina es un producto biológico, es decir, un original con características propias no intercambiables con otras preparaciones. Su eficacia reside en que actúa inhibiendo la liberación del neurotransmisor acetilcolina en las terminaciones nerviosas –que normalmente estimulan la contracción de los músculos- produciendo la disminución de la fuerza del músculo inyectado.

"Generalmente, los beneficios del tratamiento comienzan a tener efecto dentro de los cinco a diez días después de la aplicación y se prolongan durante tres a seis meses, al cabo de los cuales el paciente debe ser reinfiltrado", explicó el neurólogo.

Las inyecciones se aplican directamente sobre los músculos afectados y la dosis y cantidad de puntos de aplicación varían según el volumen y la fuerza de contracción del o los músculos comprometidos.

Los resultados demuestran que mejora la calidad de vida del paciente porque disminuye la frecuencia e intensidad del dolor, mejora la incapacidad funcional, facilita el tratamiento ambulatorio y reduce los riesgos de la cirugía.

En los cuadros de distonías generalizadas, si bien no es el tratamiento de base, Botox resulta "sumamente útil para aliviar los síntomas locales de los grupos musculares más comprometidos", ayudando a reducir posturas y en muchos casos aliviando el dolor y proporcionando a la persona una mejor calidad de vida, según los especialistas.

El tratamiento de las distonías por medio de medicamentos orales es efectivo sólo para algunos pacientes. Determinadas drogas se utilizan para interferir en la comunicación de los neurotransmisores, que son sustancias químicas que permiten la circulación de mensajes dentro del cerebro. (NA)