Jessica McClure: el milagro del pozo que conmovió al mundo

El mundo fijó sus ojos en un pozo de agua abandonado de 20 centímetros de diámetro aquel 14 de octubre de 1987. Ocurría en un jardín de Midland, Texas. El motivo era un drama: Jessica McClure, de 18 meses, había caído allí, a casi siete metros de profundidad.

La pequeña estaba jugando como siempre y, justo cuando su madre fue a atender un llamado telefónico, la pequeña cayó en el pozo y quedó atrapada.

Cissy Porter se desesperó, no encontraba explicación. Hizo todo lo que pudo, pero sola no podía rescatarla. Fue entonces cuando llamó a rescate, le pasaron oxígeno desde la superficie y un pequeño micrófono para que pudiera escuchar a su madre.

Mientras tanto, los rescatistas perforaron un foso paralelo al pozo y un túnel horizontal de 150 centímetros de largo a través de roca sólida. Allí bajó el paramédico Robert O'Donnell, que la liberó de su trampa mortal y la sacó con vida 58 horas más tarde.

La niña vio la luz, pero aquella caída le dejó sus huellas. Los médicos debieron amputarle el 60% del pie derecho por el peligro de una gangrena. Se le realizaron luego 13 cirugías para reconstruir el pie y se le hicieron nueve transfusiones sanguíneas. Sin embargo y gracias a Dios, se recuperó.

Hoy, Jessica casi no recuerda aquel episodio. La joven tiene 24 años y vive en East Texas con su padre, que hace años se separó de Cissy.

Tras el accidente, el pozo fue tapado con una placa que lleva su nombre. O'Donnell se suicidó en 1995 de un tiro en la cabeza, tras una profunda depresión, producto de la pérdida de una fama tan súbita como fugaz, que lo hundió a él en un pozo de angustia y en la adicción a los tranquilizantes.

El otro héroe del rescate, el policía William Andrew Glasscock, fue condenado en 2005 a 15 años de prisión por explotación sexual de un menor y almacenaje ilegal de explosivos.

Jessica tuvo mononucleosis y padece de artritis juvenil. Se casó en 2006. Cuando ocurrió el hecho, la población donó 700.000 dólares para su recuperación. Están en una cuenta que cubre todos sus gastos y a la que ella tendrá acceso al cumplir 25 años.