"Me dijeron que ya nos tenían marcados”

Santiago Borda, el joven de 29 años que estuvo secuestrado durante cuatro horas, señaló que los delincuentes lo amenazaron en todo momento, y reconoció que los sujetos podrían haber "marcado" a su familia antes de cometer el ilícito.

"Me dijeron que ya nos tenían marcados, pero no sé. El trato al principio fue malo, pero luego de que pagaron el rescate, me trataron mejor", expresó el joven a la prensa, previo a prestar declaración en la División Antisecuestros de la Policía Federal, en el barrio porteño de Palermo.

Santiago expresó que lo habían interceptado cuatro personas, tres hombres y una mujer, fuertemente armados, quienes lo redujeron y lo llevaron en su propio automóvil hasta una vivienda, en donde estuvo cautivo, pero no maniatado ni amordazado.

El joven señaló que los secuestradores tendrían "unos 20 y pico de años" y no se veían drogados o algo por el estilo.

Al ser consultado sobre si se le había cruzado por la cabeza la posibilidad de ser asesinado, la víctima indicó "siempre uno piensa eso".

En el momento de ser liberado, los captores le dijeron que "no hable con nadie", y él salió por sus propios medios de la casa en donde estuvo retenido y alertó a la policía que había recuperado su libertad.

Santiago sostuvo que no pudo observar el momento en que los secuestradores le incendiaron su automóvil, un Citroen C3, que apareció en la zona de Villa Soldati.

Por su parte, la madre del joven secuestrado, indicó que los secuestradores "saben de mi familia y que tenemos otros tres hijos varones".

"Ellos saben eso, porque esta gentuza sabe quiénes somos. Es Santa Rosa de Lima y yo digo que esto que pasó fue un milagro", indicó.

Pero también la mujer les advirtió a los secuestradores que tengan cuidado porque "una madre es peor que un animal furioso. Nos conocen muy bien, pero que se cuiden".

Asimismo, recordó que hace un mes fueron amenazados vía telefónica, y el automóvil que hoy fue incendiado en aquella oportunidad apareció manchado de sangre.