Murió otra mujer bombero que combatía la quema de pastizales en Baradero

Una mujer bombero que combatió un incendio de pastizales en la zona cercana a Baradero el lunes pasado, murió anoche por las quemaduras recibidas, y es la segunda integrante de ese cuerpo que fallece a raíz de ese siniestro, que causó consternación en toda la comunidad del norte bonaerense.

María de los Angeles Silva, de 42 años, y tres años de servicio como bombero, había sido trasladada desde el lugar del hecho hasta el Instituto del Quemado de la Capital Federal, con el 60% de su cuerpo quemado y las vías respiratorias áreas seriamente comprometidas.

Silva, que pertenecía al destacamento Alsina de los bomberos de Baradero, murió anoche a las 23 y se convirtió en la segunda víctima del incendio de pastizales que afectó el lunes pasado a esa zona del norte bonaerense, ya que el mismo día del siniestro había fallecido en el lugar María Jose Giménez, de 36 años.

Los restos de Silva eran velados esta tarde en el Cuartel Central de Baradero y serán sepultados mañana a partir de las 10 en el cementerio local.

La mujer bombero tenía siete hijos, de entre 5 y 22 años y su hijo mayor, Luis, sólo comentó a Télam que estaban los siete hermanos juntos y que no sabían que iban a hacer de sus vidas a partir de ahora, ya que su madre era quien criaba a los hijos más chicos.

La muerte de las dos bomberas voluntarias de Baradero son las primeras que ocurren en el país este año en el combate de incendios forestales, situación que reconoce como antecedente más trágico el sucedido el 21 de enero de 1994 cuando 25 bomberos voluntarios de la localidad chubutense de Puerto Madryn murieron en un siniestro de campos.

El incendio en la zona del delta del lunes pasado fue uno más de las decenas de siniestros que vienen ocurriendo desde marzo pasado en los campos de la zona de Baradro, Zárate y San Pedro, en el territorio bonaerense y en el sur entrerriano.

En esta oportunidad, el siniestro se declaró a las 19 "en un campo de considerables dimensiones propiedad de una firma privada de origen suizo", dijo a Télam Javier Ferlise, director del Consejo de Federaciones de Bomberos Voluntarios de la República Argentina.

Indicó además que "unos 20 bomberos divididos en tres escuadras controlaban el fuego con el recurso de dejar que se consuma la vegetación y que las llamas no se propaguen y, para
ello, utilizaban lo que se denominan "chicotes" y realizaban cortafuegos".

Los bomberos iniciaron entonces las maniobras de repliegue cuando un fuerte viento "embolsó" a siete de ellos que estaban juntos, y las llamas alcanzaron a cuatro, dos hombres y dos mujeres.

María José Giménez falleció en el lugar del hecho y su compañera, María de los Angeles Silva, fue trasladada primero a un sanatorio local y luego en helicóptero al Instituto del Quemado, donde falleció anoche.

Las llamas también alcanzaron a dos bomberos que fueron internados en centros asistenciales locales pero ya fueron dados de alta ya que tenían sólo el 15% de su cuerpo quemado.

Ferlise puntualizó que "los incendios forestales son muy traicioneros y, de hecho, en esta oportunidad, los bomberos creían que las llamas estaban controladas cuando cambió la dirección del viento".

Precisó que para combatir los incendios forestales los bomberos llevan elementos rudimentarios porque ésa es la característica que deben adoptar, aunque es preferible que cuenten con helicópteros hidrantes y equipos de oxígeno.

El director de la Federación de Bomberos destacó, además, que "en esa zona los bomberos deben salir tres o cuatro veces por día para combatir incendios de campos y la mayoría son intencionales, por lo que llamamos a los fiscales a que investiguen quiénes son los que los ocasionan".

"Con la muerte de estas dos mujeres se pasó un límite, por eso analizamos plantear acciones legales contra esta firma suiza que es propietaria del campo por el incendio del lunes pasado ya que creemos que fue intencional con el fin de lograr mejores pasturas para el ganado", dijo Ferlise.