Se hizo pasar por jeque árabe y robó joyas de Eva Perón
Un experto grupo de origen serbio utilizó una elaborada y rocambolesca trama para engañar a una joyera española y robar prendas valoradas en más de ocho millones de dólares, entre ellas una tiara que podría haber pertenecido a la exprimera dama argentina Eva Perón.
La Policía española detalló hoy la operación que llevó a la recuperación de las joyas y la detención de los presuntos delincuentes en una conferencia de prensa en Madrid, en la que mostró las alhajas, destacó Efe.
Las joyas, recuperadas en colaboración con Interpol en una caja fuerte del lujoso hotel Silver de Milán (Italia), fueron robadas en una joyería de la ciudad española de Valencia, cuya propietaria estuvo hoy presente en la rueda de prensa.
Los siete presuntos autores del robo, que pertenecen a un mismo clan familiar, fueron detenidos en Suiza, Francia e Italia y posteriormente extraditados a España, informó hoy en rueda de prensa el jefe de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta de la Policía, Serafín Castro.
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Los arrestados idearon una compleja estafa con la que se apoderaron de 10,5 millones de euros (unos 15,1 millones de dólares) en joyas, en la que se hicieron pasar por jeques árabes para engañar a la dueña de la joyería y ganarse su confianza.
El engaño fue muy elaborado y, según la Policía española, comenzó en noviembre de 2006, cuando dos jóvenes que hablaban italiano, de aspecto impecable y acaudalado, adquirieron joyas valoradas en cerca de 20.000 euros (casi 30.000 dólares) en esa joyería de Valencia.
"Los delincuentes prepararon muy bien el terreno e invirtieron 20.000 euros en tres momentos distintos -en los que pagaron al contado- para ganarse su confianza y después dar el palo gordo", dijo el comisario jefe.
Tres años después contactaron de nuevo con la dueña de la joyería para presentarle a un supuesto jeque árabe interesado en realizar un importante desembolso en joyas para sus esposas.
Uno de los miembros del grupo se hizo pasar por el falso jeque que se desplazaba en una limusina acompañado siempre por una de sus mujeres -con burka- y un supuesto secretario.
Tras una primera cita en un hotel en la que le propuso a la joyera comprar una serie de prendas por valor de más de 10 millones de euros, acudió a un nuevo encuentro en compañía de otro hombre que hacía las veces de gemólogo para estudiar las joyas.
El trato quedó cerrado y acordaron hacer el pago en metálico, y para ello una empleada de la joyería se reunió con el también falso banquero del jeque y comenzaron a contar los billetes.
A medida que contaban los fajos de billetes (operación que duró siete horas), los introducían en los cajones de una mesa, pero el mueble contaba con un doble fondo en cuyo interior había escondida una persona de poca talla que iba cambiando el dinero auténtico por otros en los que sólo eran de curso legal el primero y el último.
Ya en la tienda, la joyera se dispuso a inspeccionar nuevamente los billetes antes de entregar las joyas, pero la empujaron y los ladrones se apoderaron del botín bajo amenazas de muerte.
Entre las piezas robadas destaca una tiara donada por el rey de Holanda en la década de los años 50 del pasado siglo valorada en cuatro millones de euros, varios anillos y un par de pendientes.
El comisario jefe explicó que todos los indicios apuntan a que esa tiara perteneció a Eva Perón pero, aseguró, que en cualquier caso habrá que "verificarlo y probarlo científicamente".
La joyera Sofía Monteagudo, visiblemente nerviosa y emocionada por el recuerdo del robo, explicó que en ningún momento dudó de los delincuentes ya que eran compradores asiduos.
"Si hubiera dudado no hubiera seguido adelante", dijo Sofía, quien señaló que durante tres años se había generado una "amistad" con los atracadores ya que, insistió, compraban joyas habitualmente.
Las imágenes de las cámaras de seguridad y las huellas dactilares de los detenidos permitieron recuperar las joyas.
Con la colaboración de Interpol, en mayo de 2010 fue identificado el falso jeque, un hombre de 40 años nacido en la antigua Yugoslavia, que había sido detenido en Alemania por un robo similar.
Dos meses más tarde fue identificado asimismo su "secretario" tras comprobar que había estado alojado en un lujoso hotel de Valencia en la misma fecha que el pretendido jeque árabe.
Los dos fueron detenidos por los Carabinieri italianos y extraditados un mes más tarde a España.
Estas detenciones pusieron a los investigadores sobre la pista del resto de miembros de la banda, todos miembros del clan de los Jovanovic de Milán, que fueron detenidos el pasado marzo en Suiza, Francia e Italia e igualmente extraditados a España.