Tren bala argentino

La denominación "tren bala" al sistema de alta velocidad presentado esta noche en Casa de Gobierno, no es precisamente un eufemismo, si se tiene en cuenta que, un nuevo ferrocarril -como no se conoce aún en la Argentina-, permitirá unir Buenos Aires con Rosario, en una 1.30 hora, contra 2.15 horas del avión, 3.45 del automóvil o 5 del ómnibus.

Pero además, según expresó esta noche el secretario de Transporte Ricardo Jaime, más importante que la velocidad tal vez sea la profundidad de los cambios, al señalar que, como parte de una verdadera política de Estado, la reconstrucción del "Sistema Ferroviario Nacional", debe ser considerada una "decisión estratégica", que revertirá una situación que generó en la Argentina éxodo y desocupación en el interior del país durante gran parte de la década de los `90.

En ese sentido, Jaime destacó que el nuevo trazado comprenderá los núcleos urbanos más importantes de las Provincias de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba, como son: Campana-Zárate, San Pedro, San Nicolás, Villa Constitución-Rosario y Marcos Juárez, Leones, Bellville, Villa María y Córdoba.

El tramo que va desde Buenos Aires a Rosario será de alta velocidad (de 250 a 300 kilómetros por hora); en tanto de Rosario a Córdoba, el llamado a licitación permite que sea con tecnología similar o que use trenes de altas prestaciones de tracción diesel con una velocidad máxima de 160 kilómetros por hora.

Para el primer recorrido será necesaria la total reconstrucción del ferrocarril, lo que implica electrificación, señalamiento fijo y embarcado, comunicaciones, cerramientos de seguridad, pasos a desnivel y provisión de material rodante.

Dadas las características del emprendimiento, el gobierno puso como condición en los pliegos que los oferentes “tengan antecedentes en la construcción y manejo de trenes rápidos”.