Streetwars

Localizar su objetivo, interceptarlo y matarlo con un disparo...

Por Canal26

Lunes 3 de Septiembre de 2007 - 00:00

... de agua: es el programa de la 7ª edición del juego "Streetwars" que se lleva a cabo por primera vez en París y reúne a unos 200 participantes hasta el 24 de septiembre.

El domingo por la noche Franz Aliquo, alias "Supreme Commander", reunió a los 180 inscritos en este torneo de asesinato virtual y les entregó los expedientes secretos con la foto y la dirección personal y profesional de la persona que han de asesinar.

Esta idea incongruente, que se inscribe dentro de los fenómenos urbanos como el "flash mob" (reunión espontánea), nació en 2004 en la cabeza de Yutai Albert Liao, informático norteamericano, alias "Mustache Commander", y de su acólito Franz Aliquo, abogado neoyorquino de 32 años.

"Me encantaba jugar con pistolas de agua en el colegio y soy fanático de las películas de acción. Esto me dio ganas de realizar este juego a escala de una ciudad, como si estuviéramos en una película", explica.

"El objetivo era romper con la monotonía diaria" añade Franz Aliquo, alias "Supreme Commander". "Queríamos crear algo que nos hiciera salir de la rutina", agregó.

El concepto ya es popular en Nueva York, Vancuver (oeste de Canadá), Viena, San Francisco, Los Angeles y Londres, pero no convence a todo el mundo.

En Colonia, donde debía efectuarse en enero pasado, el juego fue anulado porque los organizadores temían que las autoridades locales lo prohibieran.

Pero el incidente no desalentó a sus creadores, decididos a instalar "Streetwars" en París durante tres semanas a partir del lunes por la noche.

Algunos no dudan en desplegar reales estrategias para alcanzar su objetivo. Quan Nguyen, de 22 años, desempleado, prevé "ir a ver dónde vive la persona y a qué hora sale del trabajo".

Otros caen incluso en la paranoia. Una llamada desconocida y algunas preguntas sobre la "guerra del agua", y ya que se piensan que alguien está investigando sobre su plan de ataque.

Las reglas son claras. Cada participante, necesariamente mayor de edad, debe realizar como mínimo un intento de asesinato por semana. Los únicos refugios permitidos son los bares, los transportes públicos y el lugar de trabajo. A la vez objetivo y asesino, el participante debe a cualquier precio evitar ser alcanzado.

En cuanto haya cumplido su misión, el asesino debe aportar la prueba de su "crimen", es decir, el expediente de la persona "asesinada". Si luego de las tres semanas varios candidatos sobreviven a los ataques, el "Supreme Commander", rodeado por sus guardaespaldas, se convierte en el objetivo. El ganador recibe un cheque de 500 dólares y una pistola de agua... ¡de oro!