Lo acusan de matar a su ex y tirar a su hija a alcantarilla

Gonzalo Lizarralde, imputado por el asesinato de su ex pareja Paola Acosta e intento de homicidio de la hija de ambos, a quien dejó en una alcantarilla junto al cadáver de la mujer, evitó hoy pronunciarse sobre el crimen pero admitió que poco después pasó por el lugar junto a otra persona manifestó que allí había "olor a bosta".

El hombre reconoció también que hizo lavar la camioneta, en la que según la acusación habría trasladado a su ex pareja y a la niña, porque tenía "líquido de batería", mientras dos peritos declararon que detectaron manchas de sangre en el vehículo, compatibles con el ADN de Acosta.

Los peritos y Lizarralde, de 34 años, declararon en el marco de la cuarta audiencia del juicio oral y público con jurados populares de la Cámara 11a. del Crimen de esta provincia, pero el único imputado en la causa evitó responder preguntas.

El fiscal Diego Albornoz, en tanto, dijo en declaraciones a Cadena 3 que las manifestaciones de Lizarralde, quien expuso durante 20 minutos y evitó referirse al femicidio e intento de homicidio de la niña, "son la defensa de él" y sostuvo que "no está obligado a decir verdades".

Paola Acosta, de 36 años, fue vista por última vez el 17 de septiembre de 2014 cuando bajó de su departamento de barrio San Martín con su hija en brazos para encontrarse con Lizarralde, quien, tras admitir su paternidad, le entregaría la cuota alimentaria de la beba y conocería a su hija.

El domingo 21 fue hallada muerta junto a la niña, quien logró sobrevivir 80 horas con una puñalada en el pecho, aferrada al cuerpo de su madre en una alcantarilla del barrio Nuevo Alberdi.

Lizarralde está imputado por homicidio calificado, femicidio y alevosía en contra de Acosta, e intento de homicidio calificado por el vínculo, femicidio y alevosía por el ataque a su hija.

El el marco de su declaración, Lizarralde dijo que el día en que asesinaron a Acosta, él le había enviado un mensaje por el sistema de chat de teléfonos celulares Whatsapp, en el que le "hincapié de ir a las 18" para encontrase con ella: "ella no contesta y responde a las 21", sostuvo.

Además, dio detalles de su rutina laboral con la camioneta que utilizaba para el reparto de sándwiches de la fábrica familiar, vehículo que los investigadores estiman que utilizó para trasladar a su mujer y su hija.

En ese marco, negó las declaraciones de Ignacio Chávez Castro, un empleado de su empresa, quien había dicho que al día siguiente del crimen, cuando iban en el vehículo, Lizarralde se bajó en el Puente Zípoli, el mismo lugar donde fue hallado el cuerpo de su ex mujer junto a la niña.

"Yo no me bajé como dicen, yo no me bajé de la camioneta, sí hice referencia, sí dije 'acá hay olor', sí dije la frase 'hay olor a bosta'", sostuvo el acusado.

Respecto de su decisión de hacer lavar la camioneta, aseguró que era algo que siempre hacía, admitió que pidió a un empleado que se quitara una mancha, pero sostuvo que se trataba de ácido de una batería.

"Yo tengo muchas baterías de autos o de camionetas que no las voy usando y se van juntando. Cerca de mi domicilio hay gente que compra baterías y las llevo para vender, cuando las llevo para vender y las voy a descargar se cae ácido de batería y ese día cuando llego a la panadería, antes que manche la pintura, le digo: 'Nelson por favor límpiame esa mancha porque no sale bien'", expresó Lizarralde.

La perito química de la Policía Judicial Carolina Marotte declaró ante el tribunal que levantó "14 muestras de sangre en la camioneta" y sostuvo que con el químico conocido como luminol halló otras "21 muestras más". "La mancha más contundente se encontró en el panel izquierdo posterior de la camioneta del lado interno", explicó Marotte, mientras la perito Nidia Modesti, que analizó las muestras, dijo que "se recuperó perfil de ADN compatible con Paola Acosta". En la audiencia también hablaron ante el tribunal el policía que secuestró el vehículo, el perito de control Hugo Fernández, y Alejandra Lamarca y una empleada de la sandwichería de la familia Lizarralde, cuyo testimonio fue ofrecido por la defensa del acusado.