Tenembaum: "Que el escándalo de los Cuadernos no termine en un papelón"

El periodista expresó en su columna el temor de que los empresarios autoinculpados cambien información por impunidad.

Por Canal26

Miércoles 8 de Agosto de 2018 - 10:03

Ernesto Tenembaum - periodista

El periodista Ernesto Tenembaum analizó el panorama político tras la aparición de los cuadernos K, en donde el ex chofer de Roberto Baratta precisó en 8 cuadernos como empresarios pagaban coimas a ex funcionarios en el período Kirchnerista.

 

En su columna en Infobae, el periodista explicó su temor de que los tres empresarios de primera línea (Ángelo Calcaterra, Javier Sánchez Caballero, ambos de Iecsa, y Juan Carlos De Goycoechea, de Isolux) que confesaron aportes en negro para la campaña electoral a cambio de negocios en la obra pública, puedan haber garantizado su impunidad a cambio de la declaración.

 

“El papelón se produciría si esa confesión no sirviera para que paguen el castigo que la ley establece sino, al contrario, para garantizar su impunidad. Quien debe decidir esto es el enigmático y arbitrario juez federal Claudio Bonadío: en esa decisión se juega su prestigio y el de la estremecedora causa que lo tiene, hasta ahora, por último responsable”, señaló.

 

Para Tenembaum poner a Calcaterra al frente de los negocios de la familia, fue una manera de esconder el nombre de Macri y así seguir haciendo negocios cuando Mauricio se convirtió en un enemigo político de los Kirchner. “¿Cuánto tiempo tardaría la sociedad civil en empezar a preguntarse por los negocios de su primo? Si toda la obra pública K estuvo manchada por la corrupción, ¿por qué razón la Justicia avanza rápido sobre Lázaro Báez y no pregunta nada sobre el primo del Presidente? Si eso se llama Justicia, es una extraña versión de la Justicia”, dice.

 

Tenembaum agrega: “Si Macri era el demonio, no se entiende por qué tantas obras centrales eran concedidas por los ministros de Cristina al primo de Mauricio. Si la esencia del kirchnerismo era la corrupción, no se entiende por qué la empresa de la familia presidencial nadaba con tanta comodidad en ese barro. Si esto ocurría y Mauricio venía a emprolijar todo, menos se entiende por qué, a un primo tan vinculado al kirchnerismo, le derivó, por decreto, 45000 millones de pesos para el soterramiento del Sarmiento. De esos cuadernos surgen demasiadas preguntas que muchas personas poderosas preferirían no tener que responder”.

 

Al finalizar, cierra que “ese tipo de procesos puede dar rédito electoral a corto plazo. A la larga, se impone la ley de la gravedad. Pero eso no se suele ver desde las alturas del poder, donde la gente cree que ese tipo de leyes se aplican solo para el resto del mundo”.