Caso Malvino: jóvenes acusados por el crimen se declararon inocentes
Se trata de Eduardo Gallino, Horacio Pozo y Eduardo Braun Billinghurst, quienes fueron indagados por la jueza que entiende en la causa. Fue un paso previo a la resolución de la situación procesal de cada uno de ellos.
Por Canal26
Martes 16 de Octubre de 2007 - 00:00
Los tres jóvenes correntinos acusados de haber golpeado hasta matar a Ariel Malvino, durante una madrugada de enero de 2006 en la playa brasileña de Ferrugem, reiteraron su inocencia y volvieron a negar haber participado en el hecho, según señalaron voceros judiciales.
Eduardo Gallino, Horacio Pozo y Eduardo Braun Billinghurst, fueron indagados por un juez correntino a pedido de la jueza de Garopaba, Eliane Cardoso Luiz, quien envió un exhorto desde Brasil mediante el cual solicitó la declaración de los imputados como paso previo a la resolución de la situación procesal de éstos.
Los tres jóvenes concurrieron ante un juez federal subrogante en medio de un total hermetismo y llenaron un formulario de varias carillas donde se les realizaban preguntas puntuales relacionadas con lo sucedido la madrugada del 19 de enero del año pasado.
Esta fue la segunda ocasión en la que los tres jóvenes respondieron un cuestionario vinculado con el hecho y, de acuerdo a las fuentes judiciales, en ambos casos reiteraron su inocencia.
El exhorto ya se encuentra en manos de la justicia brasileña y está siendo traducido al portugués para que, luego, la jueza Cardozo Luiz tome una decisión sobre los pasos a seguir en el proceso judicial.
Una fuente de la justicia brasileña señaló a Télam que "ahora la jueza deberá resolver si continúa con indagatorias o considera que tiene elementos suficientes como para resolver sobre la causa".
En este sentido apuntaron que "la jueza o bien puede absolverlos o considerar que tuvieron participación en algún tipo de delito y en ese sentido las posibilidades apuntan a una acusación de muerte en ocasión de riña, lo que sería un homicidio culposo o a la acusación de homicidio".
La ley brasileña establece que los tres pueden ser imputados del delito más severo, aunque éste haya sido cometido por uno solo de ellos, si se comprueba que los restantes fueron partícipes secundarios del hecho.
En Brasil, en caso de la muerte en ocasión de riña, la pena es de entre cuatro y 12 años de prisión, mientras que el homicidio está penado con hasta 30 años de cárcel.
Para el primero de los casos, la sentencia puede ser dictada directamente por la jueza, pero en el segundo es necesario llamar a un "jury popular", integrado por habitantes de Garopaba, que resolverán sobre la pena a aplicar a los imputados.
De cualquier manera, las fuentes indicaron que "es improbable que la jueza tome una decisión este año", debido a la cantidad de expedientes que se encuentran pendientes en su juzgado.
Mientras tanto, el abogado de la familia Malvino, Juan Carlos Dietze, sostuvo que el trámite de la última declaración, que debería "haber durado semanas, tardó meses", y que "la dilación ocurrió por las particularidades del caso".
El letrado explicó en ese sentido que existió "falta de recursos humanos y tecnológicos" y dijo que hubo "problemas en las traducciones que generaron un cambio de traductor".
"El fiscal de Santa Catarina Fabio Livio de Oliveira entiende que el futuro del proceso judicial está en riesgo por la fuga (de los agresores) en el primer momento, y si pasa más tiempo sin sentencia esa dilación se puede transformar en 'negación de derecho'", dijo el letrado.
Agregó además que "los jóvenes implicados en el crimen de Ferrugem tienen derecho a expresar su defensa y sería bueno que el año que viene podamos tener un juicio oral, y se dicte un pronunciamiento que exprese un valor de justicia".
Finalmente dijo que "más allá de los resultados, se necesita que se llegue a conocer la verdad para que la memoria de Ariel pueda tener un punto final a esta cuestión".
Con respecto a los padres de Ariel expresó que "están en un ida y vuelta, tienen la certeza de que, lleve el tiempo que lleve, será un proceso justo".
Ariel Malvino falleció la mañana del 19 de enero de 2006, luego de haber sido golpeado por un grupo de jóvenes en la playa de Ferrugem, situada en el sur de Brasil.
Testigos de los hechos, que declararon ante la justicia brasileña, señalaron a los tres jóvenes correntinos Gallino, Pozo y Braun Billinghurst, como los responsables de la muerte.
Según el expediente, Pozo le habría propinado una trompada desde atrás que hizo caer a Ariel al suelo, golpeando su cabeza contra una losetas de cemento que había en la calle, y Eduardo Braun Billinghurst fue quien le arrojó una piedra de unos 17 kilos cuando Ariel estaba con convulsiones en el piso.
Sin embargo los jóvenes, si bien admitieron haber estado en la playa esa mañana, negaron toda participación en este crimen.