Maravilla Martínez: "En boxeo no gana quien más golpea sino el que menos recibe"

El púgil argentino, Sergio “Maravilla” Martínez visitó Canal 26. El titular Diamante de los Medianos del CMB habló de sus recuerdos, su impresionante presente y lo que está por venir.

“Me fui hace 10 años, salí boxeador pero mi vida era diferente a la de ahora. No tenía las posibilidades que tuve en los años posteriores”, dice al presentarse y agrega: “Trabajé de seguridad en discotecas, fui profesor en un gimnasio dando boxeo, como entrenador personal”.

Luego, llegó la oportunidad. “Encontré lo que yo buscaba, sabía que cuando tuviera la oportunidad iba a lograr cosas grandes en el boxeo... sabía que fácil no iba a ser, ni sabía cuanto iba a demorar pero sabía que iban a llegar esas posibilidades porque yo lo estaba provocando. Es cuestión de insistir, de trabajar”, sentencia.

Ahora es millonario: “Sí, soy hincha de River”, dice con una sonrisa. Decidió hacer su valija e irse a España, donde ahora pasa parte de su tiempo, la otra parte la pasa en Estados Unidos”.

“Maravilla” Martínez asegura que logró el éxito “con un buen promotor” y afirma que España “no es un buen país para el boxeo, no hay cultura boxística”. Y sobre su propia vida, sostiene que su historia es “curiosa”.

Hoy, cree que entrenar en una tabla de surf “es un castigo para mí, no se nadar... lo hago para mejorar el equilibrio”. Lo hace por decisión de su entrenador, aunque el boxeador lo ve “peligroso”.

El 16 de abril de 2010 logró el Campeonato de la CMB tras vencer a Kelly Pavlik. Consiguió un gran logro y lo define así: “En el boxeo no gana quien más golpea sino el que menos golpes recibe”, dice sobre el deporte que eligió para vivir.

El Campeón Mundial Mediano contó que le “quitaron el título regular por un decreto que había, una cosa rara, largo de explicar pero pagué la deuda de un boxeador anterior... lo que hizo el Consejo para no dejarme de lado fue darme el título que hoy tengo que es un cinturón de Diamantes, es como un título de Super Campeón, es con mucho glamour”.

Si bien el boxeo es uno de los deportes que suele vincularse a la obstentación, “Maravilla” afirma que no probó drogas nunca, ni toma alcohol y que el auto para pasear a chicas lindas no fue su prioridad. “Lo correcto por ético o por moral es que el promotor debería decirle 'tranquilo, primero una casa', pero el promotor no puede impedirle a un chico que soñó ser campéon mundial vaya a comprarse un auto”, dice y agrega que “mi gran sueño fue comprarle una casa a mi madre y mis hermanos y ya lo hice”.

“Puedo dejar de boxear hoy y lo que gane de mis empresas me va a dejar tranquilidad”, confiesa a Canal 26. Por estos días, se está rodando en Estados Unidos una película sobre su vida. A él le gustaría hacer humor de stand up. Asegura que está “felizmente divorciado” y que en su vida no hace descontroles “ni con la comida”.

Martínez tiene el mismo título que alguna vez ganara Carlos Monzón, a quien admiró desde siempre junto a Muhammad Alí, y asegura que eso no es presión: “Es un orgullo, las peleas más difíciles es cuando mejor rendí, bajo presión funciono mejor”.

Una de las anécdotas de “Maravilla” es que es sonámbulo, dormido y todo no deja de pensar en su trabajo: “Siempre me levanto a las 4.30 a entrenar. Entonces, escucho el despertador, me baño, me visto completo, miro la hora y es la 1.30 de la mañana. Al rato, escucho el despertador, me baño, me visto completo, miro la hora y son las 2 de la mañana...”.

El próximo 27 de marzo defenderá el título posiblemente ante Matthew Macklin en el Madison Square Garden y desea que esta vez, su país esté presente: “En mi última pelea no hubo ningún periodista argentino. Creo que sale muy caro, quiero imaginarme eso”.

(Fotos y texto: Claudia Seta para 26Noticias)