Gran Hermano, gran abstinencia de Pablo
Pablo Espósito dejó la casa de Gran Hermano y para él fue un alivio. El último expulsado del reality show confesó en el debate que evitaba los acercamientos a sus compañeros que solían “acariciarse y dormir juntos”.
El problema del joven de Ramos Mejía era la abstinencia sexual, que se hizo inaguantable durante algunas noches.
El escándalo estalló cuando el morocho, sabiendo que las cámaras nunca se apagan, se acarició debajo de las sábanas y generó ser uno de los temas de los debates del programa.
Pablo tuvo que soportar, además, los coqueteos de Silvina, la misteriosa entrerriana que lo enamoró pero no llegó a aliviar su necesidad sexual. Las idas y vueltas entre los chicos calentaron la pantalla, pero sólo fueron besos y caricias.
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Los chicos se volvieron a ver en el marco del debate -el día que Pablo salió, Silvina estaba en Córdoba- y ambos se mostraron expectantes por un nuevo encuentro. "Quiero hablar con Silvina y que me cuente su historia como habías quedado dentro de la casa”, dijo él a una de las diosas del programa.
Ella le contestó y dio pie para otro encuentro: "estaba esperando que Pablo salga. Voy a pedirle conocernos más”. Después de Natalia Fava y Santiago Almeyda, Ximena Capristo y Gustavo Conti, Claudia Ciardone y Agustín Belforte, ¿nace un nuevo romance surgido del reality?
Video: Gentileza de Telefe
