Dictan sentencia por el crimen de Hernán Seijido

Un tribunal oral de San Martín dará a conocer hoy su veredicto en el juicio que se le sigue a un joven de 19 años acusado de asesinar de cuatro balazos en noviembre de 2005 en la localidad de San Miguel a un vecino tras una pelea que la víctima mantuvo el padre del imputado.

Según fuentes de la querella, el acusado Pablo Videla llegó al debate imputado como autor del crimen de Hernán Seijido y podría ser condenado a 14 años de prisión por los delitos de "homicidio simple y portación ilegal de arma de guerra".

Así lo solicitó en su alegato la fiscal de juicio Ana Armeta ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) número 6 de San Martín, integrado por los jueces Patricia Cecilia Toscano, Javier Agustín Mairani y Héctor Leonardo Díaz, a cargo del debate que comenzó el 17 de febrero pasado.

Por su parte, la defensa de Videla, que estuvo con prisión domiciliaria hasta el inicio del juicio, alegó ante el tribunal que el imputado actuó bajo emoción violenta por lo que solicitaron su absolución o, subsidiaramente, que sea condenado por el delito de exceso en la legitima defensa, dijeron los voceros.

Sin embargo, para Juan Carlos Castilla Sastre, abogado de la familia Seijido, "los dos peritos oficiales que declararon en el juicio se volcaron en oposición a que el imputado actuó bajo emoción violenta" pero, aclaró, que los especialistas "concluyeron en que el tema quede a interpetación de los jueces".

El letrado de la querella señaló que el imputado Videla no declaró en ninguna de las jornadas del debate -tampoco lo hizo en la instrucción de la causa-, ni siquiera cuando le dieron el uso de pronunciar "las últimas palabras".

Tras la jornada de alegatos del lunes pasado, el debate pasó a un cuarto intermedio hasta hoy a las 8:30 cuando los jueces darán a conocer su veredicto en el edifcio judicial ubicado en la esquina de Tucumán y Matheu, de San Martín.

"Hernán era un joven lleno de proyectos, alegre, solidario, tenía una vida construida a través de mucho amor y esfuerzo", contó a Télam María Amalia Tarabini, madre del joven asesinado.

"Nuestro dolor es insoportable y crece cada día al saber que Hernán no volverá por culpa de una familia acostumbrada a la violencia para imponer su poder. ¿Quién nos proteje de estos violentos que con mentiras quieren justificar sus asesinatos?", expresó la mujer.

"Nosotros pensamos que Pablo Videla mató a Hernán porque lo odiaba y envidiaba, además de tener la misma ideología de su padre (Héctor Videla) que sólo hablaba de matar", agregó Tarabini.

El crimen de Hernán Seijido ocurrió el 8 de noviembre de 2005 en la puerta de su casa situada en Las Delicias 926, casi esquina Muñoz, pleno centro de San Miguel, donde residen Héctor Videla, su hijo Pablo y resto de su familia.

De acuerdo a Tarabini, Hernán y sus vecinos, los Videla, mentanían problemas desde marzo de ese año cuando la familia Seijido denunció por amenzas y lesiones leves a Héctor Videla, a quien le molestaba que el chico se reuniera con amigos cerca de su casa y realizara ruidos molestos.

El día del hecho, Hernán contó a sus padres que tanto Pablo como Héctor Videla lo seguían hostigando por lo que estos fueron a la casa de sus vecinos a recriminarle esas actitudes.

Cuando Alberto, el padre de Hernán, fue a ver a Héctor Videla, este reaccionó predispuesto a pelearse con su vecino por lo que se originó un forcjeo entre ambos hombres.

En medio de la pelea, Videla, incluso, soltó a su perro rottweiler para que mordiera a Seijido, por lo que para separar a los hombres intervinieron Tarabini y Hernán, dijeron los voceros.

Según la información judicial, en esas circunstancias, Pablo Videla salió de la casa armado con una pistola Glock calibre 9 milímetros y disparó al menos cuatro tiros contra Hernán, quien cayó gravemente herido y murió instantes después.

Los voceros añadieron que Videla hijo disparó luego contra los padres de la víctima con intenciones de matarlos, aunque no alcanzó a herirlos porque se quedó sin balas.

Tras el ataque, el joven se refugió en un edificio vecino, aunque más tarde se entregó y quedó detenido acusado de "homicidio y portación ilegal de arma".

Luego del crimen, familiares y amigos de la víctima atacaron la vivienda del agresor con piedras, por lo que debió intervenir la policía para dispersarlos.

En tanto, el padre del agresor, a cuyo nombre estaba la pistola utilizada, también quedó detenido por la riña inicial con el papá de la víctima, al igual que su hijo, aunque fue liberado días después de los hechos.

En esa oportunidad, Héctor Videla quedó demorado varios días porque vecinos habían asegurado que él le había pedido a su hijo que fuera a buscar el arma con la que mataron a Hernán pero en la causa ningún testigo declaró esa circunstancia, por lo que no hubo nada que lo vincule al episodio.