Merendar sí, engordar no: Cinco comidas al día para estar bien

Para mantenernos en el peso adecuado, no sólo importa lo que se come, sino cómo se come y cómo se distribuyen los alimentos a lo largo del día. Esto nos garantiza un aporte adecuado de los nutrientes, un metabolismo más eficiente y menos ansiedad, la cual es muy común entre quienes hacen solamente las comidas principales y excluyen las meriendas. Tóme en cuenta las siguientes recomendaciones.

Por Canal26

Miércoles 18 de Enero de 2006 - 00:00

 

Las meriendas son una ventaja siempre y cuando sean saludables y nutritivas, y no opciones cargadas de grasa y azúcar. Es decir, que el merendar puede formar parte de una dieta balanceada e inclusive ayuda a sentirse mejor, siempre y cuando se analice cuánto y qué se lleva a la boca.

Los beneficios de merendar

Controla el apetito: Si come varias veces al día (tres comidas y dos meriendas) es posible que controle mejor su apetito y dieta, que haciendo solo una o dos comidas al día. Si merienda saludablemente, tendrá menos hambre y podrá controlar el tamaño y las calorías de sus principales comidas.

Regula el nivel de azúcar en la sangre: Los niveles de azúcar en la sangre bajan y suben a través del día. Generalmente, experimentamos bajones de azúcar alrededor de las 10:30 de la mañana y las 3:30 de la tarde, que por lo general se reflejan en ansiedad, hambre y mal humor. Esto es una respuesta a que el desayuno y almuerzo ya fueron digeridos, y es necesario “combustible" nuevamente para que el organismo siga funcionando. Un par de meriendas saludables en esas horas revitalizan y llenan de energía.

Acelera el metabolismo: Si ha escuchado que comer varias veces al día le ayuda a perder peso, es cierto. Claro está, que si se hacen cinco a seis comidas diariamente, el total de calorías que se consume sí importa. Cada vez que consumimos alimentos nuestro cuerpo es como una máquina programada a usar las calorías ingeridas para beneficiarse de los nutrientes. Esto significa que se está quemando más calorías que cuando se come pocas veces. El comer más frecuentemente pero en cantidades más pequeñas hacen que los objetivos del merendar sean todo un éxito, y sin aumentar el peso.

Aumenta la energía y la productividad: La comida es energía no solo para los músculos sino también para el cerebro. Cuando hay cansancio, no siempre es por falta de sueño, sino también por falta de alimentos. Dos meriendas al día, aparte de las tres comidas principales, le ayudarán a combatir el cansancio y a tener un día más productivo.

Mejora el ánimo: "Barriga llena, corazón contento". Las meriendas ayudan a controlar el apetito, a nivelar el nivel de azúcar en la sangre, aceleran el metabolismo, y aumentan la energía y productividad, por lo que los ánimos van a estar muy bien.

Tips para mantener el equilibrio:

* No se salte nunca el desayuno. Un desayuno adecuado nos proporciona la energía que necesitamos para empezar el día. Debe contener un aporte suficiente de carbohidratos de absorción lenta como el pan integral o cereales ricos en fibra. Las proteínas y el calcio de un buen vaso de leche, yogurt o queso blanco completan un desayuno equilibrado. No olvide las frutas o un vaso de jugo como parte de esta comida de la mañana.

* Comer alguna merienda liviana a media mañana evitará que pasemos las horas previas a la comida con hambre y mal humor (causados principalmente por tener la glicemia o azúcar en la sangre muy baja por pasar muchas horas sin consumir nada) y nos hará rendir más en nuestras tareas. Además llegaremos al almuerzo con menos hambre con lo que posiblemente comamos menos.

Ejemplos de lo que puede ser una merienda muy saludable es seleccionar entre alguna fruta de su gusto, algún yogurt, una tostada con queso blanco o una galleta simple o integral.

* Para el almuerzo, es recomendable incluir siempre variedad en lo que se sirve en el plato, como ensalada, vegetales o sopa, alguna porción proteica y alguna porción harinosa con moderación. Lo que sí es importante de recordar, es que para mantener un peso saludable o llegar a nuestros objetivos del mismo, es necesario cuidar mucho el consumo de grasas y evitar todas aquellas preparaciones que son frituras.


Es dañino el no beber nada como beber exageradamente, siendo una buena cantidad de uno a dos vasos de líquido con cada comida.


* La merienda de la tarde, al igual que sucede a media mañana, llega cuando la cena aún se ve lejana, para así evitar sentir mucha hambre más tarde. Ejemplos como un vaso de leche descremada con un par de galletas integrales o con una tostada pequeña con tomate, una pieza de fruta o un yogur son una excelente opción.

* La cena ligera evita las digestiones pesadas y los problemas de sueño. Incluir en ella una distribución similar al almuerzo pero en menor cantidad nos puede ayudar a evitar un sueño pesado o por el contrario, el insomnio a causa de la llenura del estómago y la digestión. No se salte la cena ya que el hambre le impedirá conciliar el sueño o le hará despertar a media noche

Opciones de meriendas saludables

Fruta
Yogurt bajo en grasa
Vaso de leche descremada
Chocolate caliente bajo en grasa y azúcar
Barra de granola
Galleta sin relleno
Tostada o tortilla con queso blanco
Bizcochos bajos en grasa
Palomitas de maíz naturales


Fuente: www.saborysalud.com