Tres millones de niñas sufren mutilaciones genitales al año

Las menores son sometidas en los países del África subsahariana y Medio Oriente. Según el documento se trata de una práctica tradicional que contribuiría a aumentar las posibilidades de matrimonio de las muchachas.

Por Canal26

Jueves 24 de Noviembre de 2005 - 00:00

 

Los padres alientan la ablación genital en su creencia de que de esa forma protegen mejor la honra y la belleza de sus hijas, reconoce UNICEF en un comunicado.

Esa organización multilateral de ayuda a la infancia calcula que en los veintiocho países donde se practica la mutilación genital de las muchachas el número total de afectadas se eleva a unos 130 millones. Si anteriormente se calculaba en dos millones la cifra anual de ablaciones, hoy se cree que se aproxima a los tres millones, lo que no significa que haya aumentado mientras tanto el número de operaciones de ese tipo, sino que ha mejorado la recogida de datos.

"Es posible un cambio real y duradero", afirma Marta Santos País, directora del centro de investigaciones de UNICEF, que ha publicado el informe. Según Santos, "todo eso cambiará cuando las comunidades - los adolescentes de ambos sexos, hombres y mujeres- sean capaces de decidir ellos mismos sobre la base de conocimientos reales" sobre el modo en que esa práctica afecta negativamente al estado de salud de quien la sufre.

Además de ser dolorosa, la ablación puede provocar una sangría prolongada, infección, infertilidad e incluso la muerte de la muchacha, señala el trabajo. Muchas niñas y mujeres la soportan en silencio y, dado el carácter privado de esa práctica, es imposible calcular cuántas son sus víctimas mortales.

El informe examina algunas de las estrategias que están ayudando ya a las comunidades a abandonar esa uso como las iniciativas que apoya la UNICEF en Egipto y que están destinadas a estimular el debate abierto sobre esa cuestión.

La participación en ese debate de líderes de opinión, entre ellos los líderes tradicionales o religiosos, puede desempeñar un papel decisivo a la hora de fomentar la discusión, señalan los autores del informe. Hay que formar a personal sanitario, a curanderos tradicionales, a trabajadores sociales y maestros para que desaconsejen ese tipo de prácticas, agregan.

La ablación es además una preocupación global pues afecta también, aunque en distinto grado, a mujeres que viven en el seno de grupos inmigrantes en los países ricos. La eliminación de la mutilación genital femenina a gran escala requerirá mayores esfuerzos que hasta ahora por parte de los gobiernos, de la sociedad civil y de la comunidad internacional, explica también el informe.

Hay ya leyes que la prohíben en algunos países africanos y de Oriente Medio, así como en aquellos otros en los que esa práctica afecta a las comunidades inmigrantes: entre ellos, Australia