Vuelve el reality show que elige a la sucesora de la "Reina del Porno"

Empresaria de cine de alto voltaje, vuelve a Playboy TV con su concurso para reclutar "talentos".

Quizás para muchos no resulta cara conocida. Pero esta señorita -no muy aseñorada que digamos- es la actriz con más éxito en el cine XXX, que el 3 de noviembre (después de la medianoche del jueves) retorna a Playboy TV con la segunda temporada de su reality Jenna´s American Sex Star.

Bajo el pseudónimo Jenna Jameson, filmó más de 200 películas y su éxito le permitió crear su propio ClubJenna -incluye una tienda y una página Web-, en 2001.

Hoy, ese multimillonario imperio sigue dirigido por la exuberante diva. Si bien hace unos meses fue adquirido por Playboy que sólo exigió un requisito: que Jenna sea la nueva imagen de su marca.

Conocida como la Reina del Porno, en Jenna´s American Sex Star, la voluptuosa conductora tiene la tarea de reclutar a la próxima estrella del cine para adultos que ganará un contrato en su club, tras sortear una cruenta ronda de desafíos eróticos.

Nacida como Jennifer Massoli, el 9 de abril de 1974 en Las Vegas; cuando tenía 3 años su madre falleció de cáncer. Siendo adolescente, y producto del llamado de la sangre (su madre fue showgirl), decidió empezar a trabajar como stripper con documento falso. Allí, se hizo adicta a las drogas hasta que logró desintoxicarse y, dos años más tarde, llegó a la industria del porno.

Sin embargo, su vida personal no tiene la buenaventura de sus negocios. Cuando adolescente fue violada por varios jugadores de fútbol americano y ya tiene dos matrimonios frustrados. Uno, en 1997, con el actor y director porno Brad Armstrong y otro, en 2004, con Justin Sterling, codirector de ClubJenna y con quien planeó su retiro para explorar su costado maternal, hasta que cambió de idea.

Desde septiembre mantiene una relación con el deportista de lucha libre Tito Ortiz. Aunque la fidelidad es una materia pendiente para ella; entre sus amoríos se cuentan sus touch and go con los cantantes Tommy Lee (marido de Pamela Anderson) y Marilyn Manson, sin contar sus aventuras bisexuales.

A pesar de su belleza, Jenna ha pasado varias veces por el bisturí: dos para aumentar su busto, dos para agregar volumen a sus labios, por una rinoplastía, un retoque de los pómulos, barbilla y dentadura, y por frecuentes sesiones de botox. Como si no fuera suficiente, para sumar atractivos a su ya retocada figura, tiene un tatuaje en su cola, el nombre Jay en el dedo anular izquierdo, tatuajes de la rodilla para abajo y en la parte trasera del cuello y siete piercings. Belleza no apta para cardíacos.