Lugares únicos alrededor del mundo: las 7 ubicaciones “misteriosas” que la UNESCO proclamó como Patrimonio Mundial en 2025

Estos nuevos destinos resaltan la diversidad de paisajes y manifestaciones culturales reconocidas este año. Desde tumbas talladas en la roca hasta antiguos relieves, cada sitio refleja la estrecha conexión entre civilizaciones y el entorno que las acogió.
Møns Klint, Dinamarca.
Møns Klint, Dinamarca. Foto: Instagram @danmarksfoto

Este año, la UNESCO incorporó nuevos sitios a su prestigiosa lista de Patrimonio Mundial, reconociendo espacios que no solo cautivan por su belleza, sino que también guardan historias clave para entender la evolución de las civilizaciones y de la Tierra. La piedra, en muchas de sus formas, es el hilo conductor que une varios de estos paisajes y monumentos recientemente declarados.

Sepulcros excavados, arte rupestre, relieves ancestrales y estructuras megalíticas nos hablan del vínculo profundo entre distintas culturas y su entorno. Ya sea como refugios, templos o testimonios geológicos, estos lugares ofrecen una conexión directa con el pasado y con los modos en que la humanidad se relacionó con la naturaleza a lo largo del tiempo.

Domus de janas (Italia)

En la isla de Cerdeña se esconde uno de los complejos funerarios más antiguos del Mediterráneo occidental. Conocidas como domus de janas —“casas de las hadas” en la tradición local—, estas cámaras subterráneas fueron talladas en la roca entre los milenios V y III a.C. Su diseño, con múltiples habitaciones, tallas simbólicas y un trazado sofisticado, revela la profunda espiritualidad de las primeras comunidades sardas y su conexión con los ancestros.

Megalitos de Carnac y la costa de Morbihan (Francia)

En Bretaña, miles de piedras perfectamente alineadas forman uno de los conjuntos megalíticos más impactantes de Europa. Estas estructuras, que incluyen menhires, túmulos y alineamientos, fueron dispuestas hace más de cinco mil años por sociedades que tenían un gran conocimiento del territorio y posiblemente usaban estas construcciones con fines rituales o astronómicos.

Megalitos de Carnac y la costa de Morbihan, Francia. Foto: Instagram @alignementscarnac

Paisaje cultural de Murujuga (Australia)

En el noroeste de Australia se encuentra Murujuga, una región sagrada repleta de petroglifos grabados en roca por pueblos aborígenes durante más de 50.000 años. Este entorno natural, de gran importancia espiritual, conserva una enorme densidad de grabados que muestran escenas de caza, figuras animales y símbolos culturales que reflejan la cosmovisión de sus habitantes originarios.

Paisaje cultural de Murujuga, Australia. Foto: Instagram @ausembco

Cañón del río Peruaçu (Brasil)

En el norte del estado de Minas Gerais, un paisaje de cavernas y ríos subterráneos se combina con arte rupestre y restos arqueológicos milenarios. El Parque Nacional Cavernas del Peruaçu es hogar de una gran variedad de especies, pero también resguarda pinturas antiguas y testimonios de asentamientos humanos que utilizaron estas cuevas como refugio y lugar de expresión simbólica.

Parque nacional de las Cavernas del Peruaçu.

Parques Nacionales Phong Nha-Ke Bang y Hin Nam No (Vietnam y Laos)

Uniendo a Vietnam y Laos a través de un corredor de selvas, montañas kársticas y cuevas colosales, esta región protegida fue reconocida como patrimonio natural transfronterizo. Las impresionantes formaciones geológicas, algunas de las más grandes del mundo, conviven con especies en peligro y culturas locales que han sabido preservar este ecosistema complejo y valioso.

Parques Nacionales Phong Nha-Ke Bang y Hin Nam No, Vietnam y Laos. Foto: Instagram @kristina.bina

Tumbas imperiales de Xixia (China)

En las faldas de las montañas Helan, al norte de China, descansan los restos de los gobernantes de la dinastía Xixia, un pueblo que prosperó en el siglo XI. Las tumbas, con una arquitectura que mezcla elementos budistas y chinos, se componen de mausoleos, templos y estructuras defensivas que reflejan el poder y la sofisticación de este reino que formó parte del entramado de la Ruta de la Seda.

Møns Klint, Dinamarca. Foto: Instagram @danmarksfoto

Møns Klint (Dinamarca)

Sobre la costa danesa, los acantilados blancos de Møns Klint se elevan con fuerza y belleza frente al mar Báltico. Estas paredes, formadas por sedimentos marinos de hace millones de años, narran en sus pliegues la historia geológica de Europa. El lugar es además un tesoro paleontológico y ecológico, con fósiles visibles tras desprendimientos y una biodiversidad única en sus bosques y praderas de tiza.