Qué se sabe de Fernando Artese, el argentino que planeaba “autodeportarse” de EEUU y terminó en la cárcel Alligator Alcatraz

Un argentino que planeaba “autodeportarse” de Estados Unidos fue detenido el pasado 3 de julio en el centro de detención migratorio “Alligator Alcatraz”. Se trata de Fernando Artese, de 63 años.
Según indicó CNN, Artese, que vivía en el país junto a su mujer e hija, pensaba documentar su salida del gigante norteamericano a través de un canal de YouTube.

Sin embargo, a pocos kilómetros de comenzar su aventura, la familia fue detenida en Jupiter Beach, donde las autoridades notaron que tenía su licencia de conducir vencida y, tras buscar en los registros, detectaron que su estatus inmigratorio era irregular.
Fue entonces cuando enviaron a Artese al centro de detención en los Everglades, conocido como Alligator Alcatraz, inaugurado por Donald Trump a principios de julio. En tanto, la agencia de noticias italianas ANSA informó que fue trasladado a Krome otro centro ubicado también en Florida.
También podría interesarte
En su caso intervinieron las embajadas de Argentina e Italia, ya que el detenido posee doble nacionalidad.
“Están buscando gente que puedan ser trabajadores y que asocian que pueden ser latinos. Están rastreando a la gente”, señaló la esposa de Artese, Mónica Riveira, en diálogo con CNN.
Según contó la mujer, el hombre le comentó que la comida diaria en Alligator Alcatraz es mínima: una manzana, una barra de cereal, una bolsita de papas fritas y un sándwich con una sola rebanada de mortadela y otra de queso. “No hay acceso libre al comedor ni posibilidad de elegir cuándo comer. Hay días en los que no se puede dormir del hambre”, aseguró.
Según el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), el hombre se quedó 10 años más del tiempo permitido por su visa: “Entró a Estados Unidos a través del Programa de Exención de Visa el 8 de febrero de 2015 y se le autorizó a permanecer en el país hasta el 7 de mayo de 2015”, señalaron.
Cómo es Alligator Alcatraz
El centro de detención Alligator Alcatraz, conocido por su construcción en tiempo récord sobre un antiguo aeropuerto en medio de los pantanos de los Everglades, es uno de los proyectos más controvertidos impulsados por el presidente Donald Trump y el actual gobernador de Florida, Ron DeSantis.

Inaugurado recientemente, el centro se encuentra en una zona con una densa población de caimanes y pitones, lo que genera un entorno hostil y disuasorio para los detenidos.
Con capacidad para albergar hasta 5.000 personas, la instalación tiene como objetivo inicial encerrar a 1.000 “extranjeros criminales”, según las autoridades, y forma parte de los esfuerzos de las autoridades de Florida para reforzar las políticas migratorias y de seguridad en la región.