Un antes y después: el truco de jardinería que hará florecer tu lengua de suegra con ingredientes de cocina

Se trata de algunos productos que ya tenés en casa. El abono casero hará que tus plantas crezcan más rápido y mucho más fuertes.
Lengua de suegra.
Lengua de suegra. Foto: Unsplash.

La sansevieria, también conocida como lengua de suegra, es una de las plantas más resistentes y populares en los hogares argentinos, ya que resisten el calor abrasador del verano y los crudos inviernos con poco sol . Pero lo que pocos saben es que, si recibe los nutrientes adecuados, puede florecer y convertirse en un verdadero espectáculo natural que llenará de belleza y buena energía tu hogar.

Según expertos en jardinería, hay un abono casero muy fácil de preparar que estimula la floración de esta suculenta de forma segura, económica y natural. Lo único que necesitás es una cáscara de banana, canela y agua.

Lengua de suegra. Foto: Pixabay.

Cabe aclarar que las flores de lengua de suegra son hermosas y delicadas y además de aportar un toque delicado al hogar, tienen un aroma riquísimo. Sin embargo, necesitan nitrógeno y potasio para poder crecer, por lo que la cáscara de banana es un elemento esencial para su nutrición.

Paso a paso: así se prepara el abono casero

Para poder preparar este abono casero especial para tus plantas, necesitarás los siguientes ingredientes:

  • Cáscaras de 2 bananas
  • 1 cucharada de canela en polvo
  • 1/2 litro de agua

Luego, deberás seguir estos pasos:

Secá las cáscaras de banana al sol durante 2 días, o en horno a baja temperatura durante 30 minutos si tenés apuro. En un recipiente, colocá las cáscaras secas, el agua y la cucharada de canela.

Lengua de suegra. Fuente: Unsplash
Lengua de suegra. Fuente: Unsplash

Licuá toda la mezcla hasta que quede homogénea y dejá reposar en un lugar oscuro entre 12 y 24 horas. Colá la preparación para eliminar restos sólidos.

¿Pero cómo se aplica en la lengua de suegra? Los expertos recomiendan aplicar el líquido directamente sobre el sustrato. Hacelo cuando la tierra esté seca para evitar exceso de humedad.

Cabe recordar que esto no reemplaza el riego regular, así que deberás seguir regando la planta normalmente, repitiendo el proceso cada quince días hasta ver los primeros resultados. Además del abono, la planta necesita buena luz indirecta, temperaturas cálidas y poca humedad.