Paso a paso: cómo cuidar un árbol de magnolia en casa para transformar tu jardín en un oasis de color

Las magnolias se consolidaron como uno de los árboles ornamentales más apreciados en América Latina. Sus flores fragantes y hojas brillantes no solo embellecen los jardines, sino que también aportan un toque de elegancia y frescura que los jardineros y paisajistas valoran enormemente.
Con especies tanto de hoja caduca como perenne, estas plantas se adaptan a distintos climas y espacios, convirtiéndose en un verdadero punto focal de cualquier jardín. Aunque crecen lentamente, las magnolias recompensan la paciencia con floraciones abundantes y follaje exuberante.

Con un cuidado adecuado, combinando luz, riego, poda y fertilización, es posible mantenerlas saludables y garantizar que florezcan año tras año. A continuación, te mostramos cómo cultivar y cuidar magnolias paso a paso, para que tu jardín luzca espectacular durante toda la temporada de verano.
Árbol de magnolia: guía práctica para cuidarlo y disfrutar de sus flores
1. Elegir la especie y el momento de plantación
- Hoja caduca: plantarla en otoño o invierno para florecer en primavera y verano.
- Hoja perenne: plantarla a inicios de primavera para que la floración se extienda durante la temporada cálida.
2. Preparar el suelo y riego
- Evitar compactar la tierra alrededor de las raíces y limitar el tránsito cerca del árbol.
- Optar por suelos húmedos, bien drenados y ligeramente ácidos, aunque pueden adaptarse a suelos arenosos, limosos y arcillosos.
- Riego recomendado: para los primeros 3-6 meses, se recomienda 2-3 veces por semana, y para los primeros dos años, una vez por semana hasta que se establezca.

3. Luz y ubicación
- Pleno sol o sombra ligera.
- En climas cálidos o secos, algo de sombra por la tarde protege las hojas del sol intenso.
- Evitar zonas con viento fuerte o heladas frecuentes, especialmente para especies delicadas como Magnolia stellata.
4. Fertilización
- Fertilizar una vez al año, a inicios de primavera, con fertilizante orgánico de liberación lenta o balanceado (14-14-14 o 10-10-10).
- Esparcir el fertilizante hasta 25 cm del tronco, evitando el contacto directo.
- Evitar excederte con la cantidad, ya que puede quemar las raíces o el follaje.
5. Poda
- Retirar ramas muertas o dañadas.
- Acortar ramas largas después de la floración, hasta la unión con otra rama.
- Las ramas principales de magnolias grandes pueden no regenerarse si se cortan desde la base.

6. Propagación
- Cortar un brote de 15 cm por encima de un nudo.
- Retirar las hojas inferiores, dejando algunas superiores.
- Sumergir en solución de enraizamiento y planta en maceta con sustrato húmedo y bien drenado.
- Cubrir con plástico y mantener la humedad hasta que se desarrollen raíces.
Con paciencia y cuidados adecuados, las magnolias pueden convertirse en el corazón de tu jardín, ofreciendo color, aroma y un toque de sofisticación natural. La clave está en elegir la especie correcta, regar y fertilizar de manera apropiada, y mantener la poda y propagación bajo control.















