Las estrellas argentinas que juegan en la NBA definen su futuro ante inminente lockout

Difícil es la situación que se está viviendo en Estados Unidos. Económicamente está en uno de sus momentos más grises en su historia y esto repercute en miles de actividades diarias, así como también áreas diversas.

El deporte no es ajeno a estos problemas. La NBA atraviesa una situación rara, extraña, un conflicto de intereses entre las franquicias (lo que en Argentina denominamos clubes) y los jugadores. Los dirigentes de las entidades buscan abaratar gastos y poner topes salariales menores a los que rigen hoy día. Los jugadores no dan el brazo a torcer, no quieren que les digan cuánto cobrar. Todo decanta en un lockout, un paro deportivo.

En el medio quedan los basquetbolistas argentinos que se despempeñan en la liga norteamericana. Mientras grandes figuras como Kobe Bryant reciben contratos millonarios, o estrellas como Kevin Durant entrenan por su cuenta, Manu Ginóbili, Luis Scola, Carlos Delfino y Andrés Nocioni definen qué hacer con su futuro.

Desde la NBA se comunicado las cancelaciones de los campus de entrenamiento y los encuentros de pretemporada, lo que deja a las claras que el lockout seguirá adelante y la temporada no comenzaría. Esto fuerza a que muchos jugadores tomen una decisión rápido.

“Manu” fue tanteado de Bologna y resta saber si jugará allí algunos meses a la espera de una definición. “Luifa” estuvo a punto de cerrar un contrato con un equipo de la liga de básquet de China, pero las exigentes normas de contratación lo hicieron cambiar de parecer. El “Chapu” ve con buenos ojos regresar a España donde brilló con el Tau Cerámica. Algo parecido haría el “Cabezón”.

Todas son dudas, pocas las certezas. La única realidad es que la economía también complica al deporte, a la NBA, la liga más exitosa en el planeta, donde se pagan sumas millonarias por los contratos, donde todos quieren jugar. Nadie está exento a tener problemas en una crisis.