Ricky Martin fue baile, alegría y romanticismo

Más de 10 mil voces se fusionaron en el Auditorio Nacional para corear las canciones que el puertorriqueño ofreció esta semana con el inicio de su gira "Una noche con Ricky Martín".

Después de cinco años de ausencia, el cantante que puso al mundo a bailar con “Living la vida loca”, regresa por la puerta grande a los escenarios mexicanos. Un sólo concierto llevará a cabo, antes de iniciar un tour por Estados Unidos, Europa y Latinoamérica en 2006.
Tres pantallas digitales de malla gigante y 32 pantallas cortas horizontales, llenaron el Auditorio de movimientos sensuales y provocativos, que puso al público de pie, desde su primera canción “Till Get to you”, en donde Ricky cantó acompañado de ritmos árabes y los gritos de los asistentes que no dejaban de escucharse.

El también símbolo sexual, de 33 años, interpretó canciones que lo han llevado a la gloria como: “Bella”, “Corazonado”, “Jaleo”, “Si tú te vas”, “Tal vez”, “Lola”, “El amor de mi vida” y no podía faltar “Te extraño, te olvido, te amo”, “La Bomba” y la inolvidable “La copa de la vida”, con las cuales demostró por qué es uno de los consentidos de México. Sólo dejó de cantar uno de sus éxitos: “She Bangs”.

Ricky hizo de todo para complacer a su público, desde mover su caribeña cadera, dar vueltas de carro, dar patadas voladoras y literalmente pararse de manos para satisfacer a sus seguidores.

No hubo ni un solo segundo, ni un solo momento en donde el público no ovacionara al cantante, lo que provocó que los corazones se agitaran, fue que a Ricky se le olvidaron la letra de algunas canciones como “Perdido sin ti” y “Te extraño, te olvido y te amo”. Sin embargo, unas fans estaban tan emocionadas, que algunas lágrimas brotaran al escuchar la voz del ex Menudo, pero también fue un deleite verlo bailar en el escenario.

En su espectáculo que duró algo más de hora y media, Ricky hizo seis cambios de vestuario, algunos como la camiseta negra transparente que lució cuando cantó “Jaleo”, y demostró por qué muchas mujeres lo consideran un símbolo sexual.
El sueño de los admiradores del ex Menudo culminó con la canción “Drop it on me”, con la que terminó uno de los conciertos más coreados y esperados en todo el año en México.

Sexy y caritativo. Siendo un hombre consciente de la destrucción que causó el huracán Katrina, en Estados Unidos, y el tsunami en Tailandia, Ricky Martin donará un dólar por cada boleto vendido de su gira, para ayudar a las víctimas y también para erradicar el tráfico sexual de los niños. Sin duda demuestra así, por qué ha llegado a ser una estrella en toda la extensión de la palabra.