España reclama el tesoro hallado en barco hundido

El Gobierno presentó un reclamo ante los tribunales federales por las 17 toneladas de monedas de oro y plata encontradas en una embarcación colonial tras su naufragio. El hallazgo fue hecho por empresa de EE.UU.

El gobierno español presentó un reclamo en los tribunales federales por el tesoro de un naufragio de la era colonial que encontró una empresa de la Florida, dijo el jueves un abogado.

El tesoro sería de España si el barco era español o si fue extraído de las aguas de ese país europeo, expresó James Goold, un abogado que representa al gobierno de Madrid.

"Es principio muy bien establecido bajo las leyes españolas, estadounidenses e internacionales, que si un gobierno como el reino de España no ha abandonado sus barcos hundidos, o sus propiedades hundidas, una empresa como Odyssey Marine Exploration no puede realizar operativos de rescate sin la autorización del gobierno", sostuvo.

"El reino de España no autorizó a Odyssey para ningún operativo de este tipo, y por medio de acciones legales buscará que le devuelvan las propiedades españolas que Odyssey ha recuperado", manifestó Goold refiriéndose a la reclamación presentada el miércoles.

Uno de los fundadores de Odyssey Marine Exploration Inc., Greg Stemm, expresó el jueves que la empresa está elaborando una declaración en respuesta a las acciones de España.

Stemm expresó anteriormente que las amenazas legales de España con "absurdas" y que Odyssey notificará a todos los demandantes una vez que concluya las tareas realizadas para determinar la identidad del barco.

Odyssey anunció hace dos semanas que había descubierto los restos de un barco con 500.000 monedas de oro y plata en algún lugar del océano Atlántico. La compañía dijo que el sitio estaba fuera de las aguas territoriales de todos los países, pero no ofreció el lugar preciso ni identificó por nombre al barco.

Aclaró también que el barco no era el HMS Sussex, y que tenía autorización del gobierno español para buscarlo en el Estrecho de Gibraltar.

Pero para España el descubrimiento es sospechoso y ha expresado que el tesoro podría provenir de los restos de algún galeón español.

Tras el anuncio de Odyssey se difundieron informes en Gran Bretaña que indicaron que el tesoro era de una embarcación británica que se hundió en 1641 en medio de una tormenta frente a Inglaterra. Odyssey no ha confirmado ni negado esos informes.

España acudió al bufete de abogados estadounidenses Covington & Burling, que la representó en otros casos similares anteriores.