Tras la polémica por las fotos prohibidas, Thalía aceptó su error

Luego de que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) anunciara que investigaría a fondo la visita de Thalía en la zona de Chichen Itzá, donde posó ante una cámara fotográfica en lugares restringidos, la cantante aceptó públicamente que incurrió en la publicación indebida de imágenes, y se comprometió a reparar el daño a la brevedad.

A través de un comunicado, difundido ayer por su casa disquera, Thalía subrayó que el motivo de haber otorgado esas imágenes, tomadas en esa importante zona arqueológica, a una revista de circulación nacional, fue mostrar qué tan orgullosa se siente de su patria y su cultura.

Sin embargo, aceptó que incurrió en un acto indebido, y que tal como los artistas se protegen mediante leyes, el rico patrimonio de México también cuenta con una serie de normas para su defensa.

Por lo anterior, destacó la también actriz, sus abogados ya trabajan para reparar el daño ocasionado.

"Como mexicana, si incurrí en la publicación indebida de algunas imágenes solamente debo ponerme al día con el INAH. Es por eso que en estos momentos mis abogados están cooperando en todo lo que se requiera, ya que gracias al INAH se sigue preservando y conservando la riqueza de nuestra cultura prehispánica", subrayó Thalía en el documento.

Cabe recordar que la controversia en torno a la publicación fue mayor, pues casualmente Federica Sodi, hermana de la intérprete, funge como delegada del INAH en Yucatán.

Por ello, Thalía aclaró: "Lo sucedido, en ninguna forma altera la relación y el respeto que tengo con mi hermana Federica, a quien siempre me ha unido un profundo amor".

No obstante, los actos de Thalía provocaron inconformidad en distintos sectores del INAH, al grado de que el Sindicato de Investigadores del Centro INAH Yucatán pidió al Comité Ejecutivo Nacional de trabajadores de esa institución averiguar posibles quebrantos a la ley durante la visita de la cantante.