24 de marzo de 1976: el audio del primer comunicado oficial de la Dictadura Militar

Esa jornada, los militares golpistas informaron a la población sobre el nuevo estado de situación planteado por el nuevo Gobierno de facto.
Golpe militar en Argentina, 1976
Golpe militar en Argentina, 1976

El 24 de marzo de 1976 no fue un día más en la historia argentina. Fue la jornada en que las Fuerzas Armadas usurparon el gobierno legítimamente constituido y derrocaron a la entonces presidenta constitucional María Estela Martínez de Perón.

También destituyeron a los gobernadores de las provincias, disolvieron el Congreso Nacional y las Legislaturas Provinciales, removieron a los miembros de la Corte Suprema de Justicia y anularon las actividades gremiales como así también la de los partidos políticos.

En suma, clausuraron -e hirieron de muerte- las instituciones fundamentales de la vida democrática.

En aquella fatídica jornada para la Argentina, la Junta militar que tomó el poder, lanzó un primer comunicado.

El mensaje de los golpistas

"Se comunica a la población que, a partir de la fecha, el país se encuentra bajo el control operacional de la Junta de Comandantes Generales de las Fuerzas Armadas. Se recomienda a todos los habitantes el estricto acatamiento de las disposiciones y directivas que emanen de la autoridad militar, de seguridad o policial, así como extremar el cuidado en evitar acciones y actitudes individuales o de grupo que puedan exigir la intervención drástica del personal en operaciones. Firmado: General Jorge Rafael Videla, Almirante Emilio Eduardo Massera y Brigadier Orlando Ramón Agosti".

Aquí, el audio original de esa luctuosa jornada:

El Día Nacional de la Memoria por la Verdad y Justicia es una fecha en la que se conmemora y busca mantener vivos en la reflexión y memoria social los tristes acontecimientos producidos en la última dictadura militar.

El 24 de marzo debe servir a todos los argentinos y argentinas, para recordar, reflexionar sobre los horrores de la dictadura, pero -sobre todo- para comprometerse con un destino pleno y en libertad.