Paso a paso: cómo revivir la planta de orquídeas y lograr que vuelva a florecer

Se trata de un truco utilizado por los jardineros para estimular el crecimiento de esta planta. Las claves, aquí.
Orquídeas, plantas. Foto: Unsplash.
Orquídeas, plantas. Foto: Unsplash.

Las orquídeas son una flor elegante, con distintos colores, y sobre todo, con un aroma riquísimo que llena de vida cualquier espacio del hogar. Sin embargo, sobre todo después del invierno, la planta no vuelve a tener flores y está tan debilitada que parece morir, pero hay una posibilidad de salvarla con algunos simples tips.

Y aunque algunos piensan que la solución está en el abono o la poda estratégica de la planta, los especialistas en jardinería advierten que la clave para revivir una planta y lograr que florezca nuevamente no está en los fertilizantes, sino en un factor aún más fundamental: la luz.

Planta de orquídeas. Foto: Pexels

Cabe destacar que las orquídeas tienen un ritmo natural de floración que debe respetarse y su espiga floral suele comenzar a desarrollarse a fines del otoño y principios del invierno, para que sus flores se abran al inicio de la primavera, con una duración de tres meses promedio.

Este ciclo se repite cada 8 a 12 meses, dependiendo de la subespecie. Por eso, si la planta no está en ese período o acaba de florecer, no necesariamente hay un problema.

Planta de orquídeas. Foto: Pexels

Cómo cuidar una planta de orquídeas: el verdadero secreto para que florezca

Un error muy frecuente a tener en cuenta, es colocar las orquídeas en lugares con poca iluminación, solamente para que cumplan un rol decorativo. Y si bien las plantas no deben exponerse al sol directo, sí requieren de una cantidad de luz intensa, sobre todo en sus raíces.

Para cuidar una planta de orquídea, debés seguir estos pasos:

  • Colocá la maceta cerca de una ventana orientada al sur o sureste, evitando la exposición directa al sol.
  • Usá recipientes transparentes, ya que las raíces también necesitan captar luz.
  • Observá las hojas, ya que si son verdes oscuro, es que les falta luz. Por otro lado, si son verde claro, es porque tienen exceso de luz
  • Cuidar el entorno durante la floración: cuando esto sucede, lo importante es no mover la maceta, ya que la misma espiga floral buscará la luz y, si se cambia de posición, puede generar un estrés en la planta, provocando que muera.
Planta de orquídeas. Foto: Pexels

Por último, el riego es otro de los factores clave para que una orquídea se mantenga sana y pueda florecer correctamente, aunque no es tan determinante como la luz en lo que respecta a la floración. Con regarla una vez por semana en invierno, y cada cinco días en verano, será suficiente para que crezca sana y feliz.