"Comprendo a Hitler y le tengo un poco de simpatía, aunque creo que no era un buen tipo"

Por Canal26

Miércoles 18 de Mayo de 2011 - 00:00

Las declaraciones del cineasta danés Lars von Trier sobre Hitler dominaron el miércoles el Festival de Cannes y volvieron muy difícil que su película "Melancholia" conquiste una Palma de Oro, pese a las disculpas pedidas luego por el realizador.

"Comprendo a Hitler y le tengo un poco de simpatía, aunque creo que no era un buen tipo", declaró Lars Von Trier en una rueda de prensa tras la presentación de su película "Melancholia", donde trata del fin del mundo.

"Creo que (Hitler) hizo malas cosas, sí, absolutamente, pero puedo imaginarlo sentado en su búnker, al final", agregó Lars Von Trier

"Ay Dios, esto es terrible", se escuchó murmurar a Kisten Dunst, la estrella de la película, que participó en la rueda de prensa donde las declaraciones del cineasta cayeron como una pequeña bomba.

Pocas horas después la dirección del Festival de Cannes indicó que había solicitado al realizador danés, Palma de Oro en 2000 por "Bailarina en la oscuridad ("Dancer in the dark") y Gran Premio del jurado en 1996 por "Breaking the waves", que presentara sus excusas.

"Si ofendí a alguien esta mañana con mis declaraciones en la rueda de prensa, pido sinceramente disculpas", afirmó Von Trier en un correo electrónico enviado por Meta Louise Foldager, productora de su última película "Melancholia".

"No soy antisemita ni tengo ningún tipo de perjuicios raciales, tampoco soy nazi", agregó Von Trier.

En su comunicado, la dirección del festival indicó que las declaraciones de Lars von Trier le habían "conmocionado" y por ello le pidieron que se explicara.

El cineasta "precisó que se había dejado provocar y presentó sus excusas", añadió el comunicado, en el que la dirección del festival destacó que "no admitirá jamás que el evento pueda ser el escenario de semejantes temas, de semejantes declaraciones".

El polémico realizador dijo en la rueda de prensa que durante un tiempo creyó que era judío, pero que luego se dio cuenta que era nazi.

"Durante mucho tiempo pensé que era judío, y estaba contento de ser judío. Pero entonces me di cuenta que no lo era. Descubrí que era nazi porque mi familia era alemana, Hartmann, lo que también me gustó", dijo el cineasta, que empezó como bromeando y poco a poco se fue enredando en sus despropósitos.

"Sólo estoy diciendo que comprendo al hombre", insistió el realizador. "Pero ciertamente no estoy en favor de la Segunda Guerra Mundial, ni estoy contra los judíos".

"Estoy en favor de los judíos, pero no demasiado, porque Israel jode mucho", explicó el realizador, que con sus declaraciones provocó que los comentarios se centrarán más en sus palabras que en su película.

El otro protagonista de la jornada fue Nicolas Sarkozy, con un filme "de ficción" que narra su ascensión a la presidencia de Francia, en el 2007, que se presentó en Cannes fuera de concurso.

"La Conquête" (La conquista), del francés Xavier Durringer, se estrenó en momentos en que Dominique Strauss-Kahn, que se preveía sería su rival en la próxima elección presidencial en Francia, fue acusado en Nueva York de agresión sexual.

Los "hombres políticos son bestias sexuales", dijo Denis Podalydes, que interpreta a Sarkozy, en una escena que desató aplausos entre los periodistas que siguen con un ojo el certamen y con el otro el caso Strauss-Khan, director del Fondo Monetario Internacional (FMI) ahora detrás de las rejas.

Con un ritmo tenso, ágil, la cinta devela los tejes y manejes de Sarkozy y otros líderes políticos de derecha, como el entonces presidente Jacques Chirac, así como sus problemas y líos afectivos con Cecilia, en ese entonces su esposa.

"Todo es cierto pero todo es ficción, porque es sobre todo una película, que cuenta una historia", dijo el realizador en una rueda de prensa en Cannes.

Cuenta "la historia de un hombre que conquista el poder y pierde a su mujer, Cecilia", dijo Patrick Rotman, el autor del guión.

El espectador de esta película se transforma, en sus palabras, en "un ratoncito bajo la mesa, que escucha y ve todo" y se da cuenta de lo que pasa tras los bastidores del poder.

Uno de los protagonistas principales de esta película - una de las más esperados en este Festival de Cannes - es el lenguaje usado en las altas esferas del poder, donde llueven los más crueles y crudos insultos.

"Es un lenguaje brutal, violento, con frases asesinas", dijo Rotman en una rueda de prensa en Cannes tras la presentación de "La Conquête", la primera película jamás realizada en Francia sobre un jefe de Estado en funciones.

En Francia casi no hay películas que aborden la política, que es un género muy fértil en los países anglosajones, y también en Italia, donde se han hecho varios filmes que satirizan a Silvio Berlusconi.

España será la protagonista de la jornada del vienes, cuando se presentará en el concurso por la Palma de Oro "La piel que habito", de Pedro Almodóvar.

Poco se sabe sobre la decimoctava película de Almodóvar, protagonizada por el actor Antonio Banderas, que encarna a un cirujano plástico.