Preocupante revelación: la relación de las pesadillas frecuentes con la muerte prematura, según la ciencia

Según la ciencia, dormir mal puede afectar directamente la salud, como el aumento del ritmo cardíaco, la presencia de sudor y reacciones de estrés.
Tener pesadillas frecuentes podría relacionarse con una muerte prematura. Foto: Unsplash.
Tener pesadillas frecuentes podría relacionarse con una muerte prematura. Foto: Unsplash.

Un estudio académico señaló que dormir mal, con pesadillas, podría relacionarse directamente con el envejecimiento más rápido y con una muerte prematura. En ese sentido, se evidencia que aumentan las probabilidades de morir antes de los 70 años.

Durante el Congreso 2025 de la Academia Europea de Neurología (EAN), un grupo de investigadores presentó un estudio en el que analizaron la relación entre las pesadillas recurrentes y el riesgo de muerte prematura.

Parálisis del sueño, sueño, dormir. Foto: Freepik.
Las pesadillas frecuentes podrían alterar nuestra salud. Foto: Freepik.

A partir de sus hallazgos, señalaron que estos trastornos del sueño podrían tener implicaciones más serias de lo que comúnmente se piensa, subrayando la importancia de prestar mayor atención clínica a las pesadillas persistentes.

“Nuestros cerebros dormidos no pueden distinguir los sueños de la realidad”, comentó Abidemi Otaiku, neurocientífico del Imperial College de Londres y el supuesto autor del estudio, a través de un comunicado.

De más está decir que las pesadillas nos generan un aumento del ritmo cardíaco, presencia de sudor y reacciones de estrés.

Cómo influyen las pesadillas frecuentes en la salud de las personas

La investigación hizo un seguimiento de la frecuencia de las pesadillas en niños y adultos, durante períodos de hasta 19 años.

En los resultados se evidenció que tanto niños como adultos que padecen pesadillas con frecuencia experimentan un envejecimiento biológico acelerado.

Incluso, aquellos adultos que sufrían pesadillas semanales tenían más del triple de probabilidades de morir antes de los 70 años de edad, respecto de los que no suelen tenerlas.

“Las pesadillas provocan elevaciones prolongadas de cortisol, una hormona del estrés estrechamente relacionada con un envejecimiento celular más rápido”, explicó Otaiku.

La luz interfiere en el sueño a la hora de dormir. Foto: Unsplash.
Además de un sueño pesado, las pesadillas traen consecuencias en nuestra salud. Foto: Unsplash.

“Para quienes sufren pesadillas con frecuencia, este estrés acumulado puede influir significativamente en el proceso de envejecimiento”, agregó.

Y cerró su explicación diciendo: “Además, las pesadillas alteran tanto la calidad como la duración del sueño, perjudicando la esencial restauración y reparación celular del organismo durante la noche. Los efectos combinados del estrés crónico y la interrupción del sueño contribuyen probablemente a acelerar el envejecimiento de nuestras células y nuestro organismo”.