Cavenaghi anunció su retiro tras ganar la Copa Libertadores

"Hoy es mi final dentro de River. Acá se termina una etapa en el club", aseguró Cavenaghi apenas finalizó el encuentro que el conjunto "millonario" le ganó por 3 a 0 a Tigres de México en un colmado estadio Monumental de Núñez, en la segunda y decisiva final de la competencia.

Más de 60 mil personas le brindaron una fraternal despedida al gladiador de mil batallas, que sostuvo que la obtención de la copa representa "la alegría más grande" de su extensa carrera deportiva: tiene 31 años.

"Yo había dicho que cuando terminaba la copa terminaba mi ciclo en River. Estoy muy contento y no tengo dudas de que este grupo le va a seguir dando muchas alegrías a la gente", enfatizó, y agregó: "Este grupo va a marcar una era dentro del club por todos los logros conseguidos".

El contrato del "Torito" con River finalizó a mediados de año y jugó la Copa Libertadores debido a que firmó una extensión especial hasta que terminara la competencia.

Si bien la institución quería renovarle el vínculo, el delantero optó por marcharse de un club al que supo respaldar en los momentos más difíciles de la historia de la entidad: probablemente emigrará a un equipo en donde pueda jugar con mayor continuidad.

Para sorpresa de muchos, sobre todo porque estaba relegado en la consideración de Marcelo Gallardo, desde el sábado el goleador sabía de boca de su entrenador que iba a ser titular este miércoles por la noche.

Y según le informaron allegados al futbolista a NA, salir desde el minuto cero al campo de juego su motivación se renovó y, tal como declaró el propio "Muñeco", dijo que estaba ante "la oportunidad más importante" de su vida al disputar una final de la copa.

Cavenaghi quedó relegado en el último año por detrás de Teófilo Gutiérrez y Rodrigo Mora y en la actualidad el recién llegado Lucas Alario se convirtió en el delantero de área tras la ida del colombiano a Sporting de Lisboa.

El largo camino del regreso.

Las lesiones no lo ayudaron y en agosto del año pasado debió ser operado de una bursitis en el dedo del pie derecho que le impedía jugar hasta un picado con sus hijos.

De esta manera, no tuvo actividad en el último semestre de 2014 y comenzó este año haciendo la pretemporada a la par de sus compañeros, aunque con la incógnita que generaba saber si podría recuperar su nivel.

Este último Cavenaghi, que regresó al club con la gestión de Rodolfo D´Onofrio, demostró que su olfato goleador está intacto y que dentro del área tiene todo claro, pero cada vez le cuesta más participar del circuito creativo porque carece de movilidad.

Su segundo segundo ciclo -con Daniel Passarella como presidente- fue tan movilizador como sorpresivo por su abrupto final.

Cuando River se fue al descenso, Cavenaghi jugaba en el Inter de Porto Alegre y recibió el llamado de su mejor amigo, quien desconsolado le lloraba al teléfono contándole sobre la pérdida de la categoría.

Después de llorar junto a David La Regina, para calmarlo le prometió que iba a rescindir su contrato en Brasil para devolver al "Millonario" a la máxima categoría y, luego de haber jugado en canchas que nunca hubiera imaginado, lo cumplió.

Sin embargo, tuvo un sorprendente final cuando el entrenador Matías Almeyda le comunicó a él y a Alejandro Domínguez, que no los iba a tener en cuenta para la temporada en Primera y ambos debieron hacer las valijas.

Su primera etapa en el club comenzó con el debut en Primera División con tan solo 18 años y, en dos temporadas, acumuló tres títulos y a los 20 fue vendido al Spartak de Moscú.

Pasó mucho tiempo desde aquella versión del "Torito", pero el amor de "Cavegol" por River permanece intacto y este miércoles se dio el gran gusto de su vida: ganar la Copa Libertadores y cerrar un ciclo en el club siendo ¡campeón!