Hinchas alemanes enfurecidos destrozan comercios italianos tras quedar fuera del Mundial
En Quedlinburg, alrededor de 25 hinchas ingresaron en un restaurante italiano que tomaron por asalto, arrojando por el aire sillas y mesas. En Stendal, también en el estado de Sajonia-Anhalt (este), unos 40 alemanes atacaron una heladería, mientras que en Magdeburgo destrozaron los floreros de las ventanas de otro restaurante de comida italiana. El propietario del local resultó levemente herido.
La frustración por la derrota hizo que algunos hinchas se tornaran violentos. En Hoyerswerda (este), unas 150 personas estuvieron implicadas en actos vandálicos al prender fuego a cubos de basura o arrojar botellas. Siete personas fueron detenidas, indicó Jens Baehr, portavoz de la policía.
En Zweibrücken (oeste), cerca de doscientas personas participaron de una gresca general, en la que 12 individuos fueron arrestados. En Stuttgart, un policía resultó lastimado por un botellazo.
En cambio, en Berlín, donde más de un millón de personas se juntó en el Fan-meile para ver la semifinal del Mundial, casi no hubo incidentes, aunque unas 45 personas fueron detenidas, principalmente por excesos verbales o, en tres casos, hacer el saludo nazi
