El único cine rural tiene 90 años y está en un pueblito bonaerense que guarda un fuerte vínculo con Juan Domingo Perón
Allí viven 150 personas, juntas pusieron manos a la obra para rescatar del olvido a un tesoro que hoy es admirado y visitado por turistas.

A casi dos horas en auto se encuentra un pueblito que guarda mucha historia en la provincia de Buenos Aires, entre sus calles aún está de pie el Cine Club Colón de Roque Pérez, el único rural que se encuentra en funcionamiento en el distrito y que fue declarado de Interés Provincial y Cultural. A casi 90 años de su inauguración, con varios años de abandono y una reapertura en 2013, esta resignificación del espacio es una victoria para quienes cuidan con recelo el ayer y buscan mantener viva la memoria.
La historia de esta edificación y el vínculo poco mencionado que tienen estas tierras con Juan Domingo Perón.
El último cine rural
La primera inauguración del Cine Club Colón fue el 20 de septiembre de 1934, inmediatamente se transformó en el centro de la actividad social y cultural de la época y en el centro de atracción de la zona. Representaciones teatrales, películas y jornadas de juegos, lo convirtieron en un espacio cultural con el objetivo de mejorar la zona.
En 1933, el inmigrante italiano Jerónimo Coltrinari pensó en tener un cine en el mismo lugar donde desarrollaba su actividad rural y fue gracias a Rómulo Mazagliari, junto al “Tano” Mangalardo, quienes convirtieron las ideas en un edificio.

El lugar donde fue levantado es La Paz Chica, un paraje donde se encuentra la Ruta de los Almacenes de Campo, un circuito turístico y cultural en Roque Pérez. Incluso durante los primeros años, dentro del cine funcionaba una cantina.
Pero décadas posteriores, el lugar terminó abandonado hasta que en la década del 80, un grupo de mujeres recuperó sus instalaciones. Debieron pasar otro par de años para que el 22 de noviembre de 2013 el Cine Club Colón se recuperara de manera oficial con una nueva reapertura.
La historia del Cine Club Colón
Tras casi un siglo, en el que atravesaron abandonos y reaperturas que fracasaron, fue “Pepe” Guidobono quien impulsó la reapertura del Cine Club Colón en 2013.
También fue clave el rol de Nelly Albanesi, hija del primer carnicero de la zona y propietaria de un almacén de Roque Pérez, redactaba petitorios y juntaba firmas para lograr restaurarlo. Según los relatos de los lugareños, por aquel entonces, los vecinos se peleaban por colaborar para poner a punto las instalaciones del cine, los bomberos voluntarios palearon más de un metro de barro para descubrir el piso de baldosones y hasta se armó un pequeño batallón de carpinteros, pintores de brocha gorda, herreros, costureras, bordadoras, lustradores.

En el recorrido actual, los visitantes pueden conocer más de la historia del lugar, en donde la cinematografía, la música, la cultura popular italiana, junto con los grandes bailes y su cantina, hicieron de este espacio un lugar emblemático de socialización de la cultura en Roque Pérez.
Se puede observar también un conservado escenario con cabina para el apuntador, butacas de madera lustrosa, boletería con reja forjada a mano, y hasta un primer piso con palcos y sillas ricamente tapizadas.

Perón y Roque Pérez
Juan Domingo Perón, tres veces presidente de la Argentina, ha sido objeto de debate por muchos motivos que exceden el plano político. Uno de ellos es su fecha y lugar de nacimiento. Si bien siempre se afirmó que nació el 8 de octubre de 1895 en Lobos, provincia de Buenos Aires, en las últimas décadas se ha dado conocer otra historia: también nacido en el mismo mes, pero el día 7 de 1893 en un rancho de Roque Pérez, un pueblo a 40 kilómetros de donde se dice popularmente.
El mismo Perón inauguró un museo de Lobos en 1953, en la que supuestamente fue su casa natal y que aún sigue en pie. Del rancho de Roque Pérez nadie hablaba hasta mediados de la década del 90, cuando comenzó el debate.

Uno de los primeros en hablar de aquel rancho–ubicado en Pte. Perón Nº 231-fue el médico personal del General y quien luego sería biógrafo suyo, Hipólito Barreiro. Fue él quien descubrió que en realidad había sido anotado en Lobos porque era la localidad más cercana que les quedaba a sus padres:Tomás Mario Perón y Juana Sosa. Sus progenitores no se habían casado cuando nació, lo que lo convertía en hijo natural, algo que para aquella sociedad de pueblo no estaba bien visto.

El punto de conflicto podríamos situarlo a fines de 1910, cuando un joven Perón preparaba su ingreso al Colegio Militar, institución que siempre cuidó sus formas y más aún en una sociedad conservadora como la de inicios del siglo XX. Un hijo natural como él y con una madre descendiente de tehuelches como lo era Juana, formaba un combo no bien visto para los cánones necesarios de admisión y eso explicaría los“cambios” de papeles en su ingreso.

















